El 6 de octubre llega la “2da Fiesta del Arraigo y la Familia Rural” al Partido de Azul, en el Paraje Pablo Acosta. La fiesta es organizada por la Asociación del Centro Educativo para la Producción Total Nº 31 y la Comunidad de Pablo Acosta, con el auspicio de la Municipalidad de Azul. La fiesta es impulsada por el programa “Jóvenes y Arraigo” y fue declarada de interés municipal y de interés comunitario por el Concejo Deliberante de Azul.

“Jóvenes y arraigo” es un programa que busca darle lugar a las voces de los jóvenes para solucionar las problemáticas del territorio rural y luchar contra el desarraigo. Marcelo Tello, uno de los coordinadores del programa, explica que los CEPT no solo brindan educación secundaria con orientación agropecuaria, sino que también fomentan la autogestión y la participación comunitaria a través de los Consejos de Jóvenes. La fiesta es un ejemplo de esto. El programa surgió en el 2021, pos pandemia, en colaboración con la SENAF (Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia).

Tello invita la fiesta avisando que “el recorrido por el paisaje hasta llegar a la fiesta es hermoso. Cerca está el Corredor Serrano, la Boca de la Sierra, que es de las mismas sierras de Tandilia, y el Monasterio Trapense, un lugar turístico que también está en el camino. Al final de la ruta ochenta, está el paraje Pablo Acosta, que es donde se va a realizar el evento a lo largo de todo el día. Está pensado para la comunidad, pero también para quienes les guste ver a los paisanos y las paisanas con sus vestimentas típicas, a quienes les guste el folklore. Sonará mucho folklore durante todo el día y la jornada terminará con un baile popular campero”.

La entrada será libre y gratuita. “Es una fiesta sin fines de lucro y que promueve justamente el encuentro de la gente, se hace con el objetivo de que todos puedan estar y los precios van a ser populares” aclaran desde la organización, que está hecha en su mayoría por los jóvenes y adolescentes que cursan en el CEPT “Pablo Acosta”.


Dylan, uno de los organizadores que tiene catorce años, reflexiona que “la fiesta surge a partir de una necesidad de las comunidades y de los jóvenes rurales de juntarse y representar con orgullo nuestra tradición. El año pasado hubo alrededor de ochenta caballos con sus respectivos jinetes. El desfile criollo es para representar lo que ellos hacen en su día a día que es el trabajo rural. El caballo es muy importante en el campo para las familias, es de gran utilidad para el trabajo, pero también con él se puede hacer deporte como la prueba de rienda, el desfile criollo, la sortija, la jineteada. Hay muchas utilidades que se le pueden dar al caballo y nosotros tratamos en la fiesta de demostrarlas, para que la gente de la ciudad quiera al caballo como lo queremos nosotros”.

La fiesta se creó para ofrecerle a la comunidad un día de encuentro y recreo. En la fiesta anterior, relatan, participaron 5000 personas. Hubo además cuarenta stands en la feria. Este año también los habrá. La propuesta de la feria es que nadie revenda productos ni comida, sino que sean un canal de venta para feriantes de la agricultura familiar. La comida estará a cargo de la cantina y servirá para solventar la fiesta. Se venderán sanguches de cordero, de bondiola, de chorizo, entre otras delicias. También se podrá disfrutar de diversos shows. Serán más de ochenta artistas los invitados a subir al escenario, en su mayoría adolescentes.

“En mi caso yo hago recitado. Hay también muchos jóvenes que tocan la guitarra y que cantan. Bueno este año armamos un grupo con chicos del CEPT, somos diez y nos llamamos “Cantores y Guitarreros”. Este grupo se creó genuinamente el año pasado y nos fuimos presentando en diferentes fiestas rurales, jineteadas, peñas folclóricas y demás” agrega.

Dylan recita milongas. “Las milongas son canciones habladas. No es que son movidas las canciones sino que vos las vas contando” aclara y nos ofrece una de su autoría que va a estar compartiendo en la fiesta.

“Qué lindo cuando mi gente en una gaucha reunión/demuestra en su corazón todo lo que lleva y siente./Hoy el pasado y el presente de este pueblo soberano/ se estrechan fuerte la mano/y en muestra de esa hermandad/se une el campo a la ciudad/ el pueblero y el paisano./ Que ha muerto la tradición algunos dan a entender/ y hasta suelen pretender que les demos la razón/pero yo a mi corazón que no entiende esas cuestiones/ llevo nuestras tradiciones/ con orgullo verdadero/y es mi amor por los camperos/ lo mejor de mis canciones”.

“Yo creo que la mayoría de mis compañeros, y yo también, pensamos que la cultura es algo que llevamos dentro arraigada. Nos gusta la ruralidad y es una forma de compartir aquello que nos gusta con otros. De expresarnos también. De mostrar que es lo que hacemos en el campo” concluye.

Hasta el 23 de septiembre, los artesanos y productores de la agricultura familiar que lo deseen, pueden inscribirse para participar de la feria, enviando un mensaje al 2281 566055. También hasta el 25 de septiembre hay tiempo para inscribirse al “Desfile criollo” y se puede hacer comunicándose por mensaje al +54 9 2281 49-1366 (Nino Hernandez) o al +54 9 249 468-0317 (Uriel Salsamendi).

La fiesta será el 6 de octubre desde las diez de la mañana hasta el anochecer en el Paraje Pablo Acosta.