La explosion de numerosos bípers o buscapersonas este martes en varios puntos del sur del Líbano dejan al menos nueve muertos y más de 2800 heridos, 200 de ellos de gravedad, según informaron autoridades locales. La cifra estimada de afectados por las detonaciones en cadena de los dispositivos en el territorio libanés continúa en aumento, según las actualizaciones del balance ofrecido por el Ministerio de Salud Pública del Líbano.

La explosión

El titular del departamento gubernamental de Salud, Firas Abiad, anunció en una rueda de prensa que entre los fallecidos hay un menor de 8 años, y precisó que la mayoría de los heridos, cuya cifra total continúa escalando, sufrieron daños en la cara, las manos o el abdomen.

"Una gran cantidad de personas con heridas diversas están llegando a los hospitales libaneses y se ha descubierto inicialmente que las heridas están relacionadas con la explosión de aparatos inalámbricos en posesión de los heridos", reportó el Ministerio de Salud Pública del Líbano en un comunicado, en el que llamó a todos los hospitales en las áreas afectadas a activar el máximo nivel de alerta.

También se dirigió a la población general libanesa llamando a la precaución frente al uso de dispositivos similares. "El Ministerio pide a todos los ciudadanos con aparatos de comunicación inalámbrica que permanezcan lejos de ellos hasta que se revele la verdad sobre lo que está ocurriendo", agrega la nota ministerial.

Según la Agencia Nacional de Noticias (ANN) del gobierno libanés, el "incidente hostil de seguridad sin precedentes" ha supuesto la detonación de un sistema de buscapersonas de alta tecnología, causando "decenas" de heridos. Al Haddad reportó que, según fuentes internas libanesas, Israel logró infiltrar estos dispositivos, utilizados para la comunicación entre el personal del Hezbolá, haciéndolos detonar mediante una serie de hackeos

El incidente masivo se produjo mientras el Gabinete de Ministros se encontraba reunido en Beirut, donde el primer ministro, Najib Mikati, pidió la inmediata salida del titular de Salud Pública, Firas Abiad, para lidiar con la situación, de acuerdo a un comunicado gubernamental.

Los bipers

Los aparatos, conocidos como beepers, pagers o buscapersonas, se encontraban en posesión de varios miembros del grupo chií libanes pero también en manos de civiles, según afirmó el ministro de Telecomunicaciones del país, Johanny Corn, formaban parte de un cargamento recientemente llegado al Líbano.

"Aún no tengo detalles, pero estoy al corriente de que este cargamento de dispositivos llegó recientemente", dijo el titular de Telecomunicaciones en declaraciones a la prensa tras la reunión del Consejo de Ministros libanés.

El ministro indicó que las baterías de los buscapersonas se sobrecalentaron, por lo que algunas personas pudieron "sentir la temperatura del dispositivo y lo tiraron" previo a su explosion. "A lo mejor se activó a distancia, pero no sabemos cómo", añadió Corn, que deslizó que lo más probable es que los buscapersonas fueran introducidos al Líbano con ese propósito.

"Debemos saber cómo y cuándo entró ese cargamento de dispositivos al Líbano, a qué compañía pertenece, quién es su dueño... Debemos conocer más detalles para saber cómo funciona este dispositivo y cómo entró al Líbano", aseveró Corn.

Acusaciones

El movimiento islamista Hezbolá, respaldado por Irán, culpó a Israel por las explosiones y prometio que la operacion tendrá un "justo castigo". El Ministerio de Exteriores del Líbano y el grupo chií libanés Hizbulá atribuyeron individualmente a Israel la explosión masiva de bípers.

"Tras examinar todos los hechos, datos actuales e información disponible sobre el malvado ataque ocurrido esta tarde, consideramos al enemigo israelí como completo responsable de esa agresión criminal que también tuvo como objetivo a civiles y que mató a varias personas", anunció Hizbulá en un comunicado.

"Esta escalada israelí grave y deliberada coincide con amenazas israelíes de ampliar la guerra hacia el Líbano y con su postura intransigente que llama a más derramamiento de sangre, destrucción y sabotaje", denunció el departamento gubernamental libanés en un comunicado.

La defensa israelí

Momentos después de que se produjera el ataque, Topaz Luk, un asesor cercano al Primer Ministro israelí, Benjamin Netanyahu, publicó un mensaje en X, que fue rápidamente eliminado, donde insinuaba la autoría israeli tras el ataque según informó el medio local Haaretz.

En respuesta, el gobierno israeli declaró que Luk ya no cumple la función de vocero de Netanyahu, ni es parte del "círculo interno" de asesores del primer ministro. Hasta ahora, el Ejército de Israel no ha emitido ningún comunicado respecto al ataque, o instrucciones para el público israelí.

Según reporta Haaretz, los altos mandos de la seguridad israelí fueron convocados hoy a una reunión de emergencia con líderes del gobierno, para tratar el escalamiento de la seguridad al norte del territorio.

Luego de los reportes de las explosiones, Gabi Na'aman, la cabeza del concejo local de Shlomi, una ciudad al norte de Israel, pidió a los residentes mantenerse cerca de los refugios. "Dada la situación de seguridad única en la que nos encontramos la pasada hora, pido extremar la precaución y mantenerse cercanos a sus niños y refugios", escribió Na'aman.

La cuestión iraní

Como resultado de la cadena de explosiones, el embajador de Irán en Libano, Mojtaba Amani, sufrió una herida superficial, pero ya se encuentra "en buen estado". “Mojtaba Amani, el honorable embajador de la República Islámica de Irán, sufrió una herida superficial. El estado general del honorable embajador es bueno”, informó en su cuenta de X la legación diplomática iraní.

Irán es uno de los principales aliados financieros de Hezbolá, grupo al que ha suministrado armamento desde los años 80. Teherán además capitanea el llamado 'Eje de la resistencia', una alianza informal anti israelí formada además de por Hizbulá por los palestinos de Hamás y los hutíes del Yemen, entre otros.