River igualó 1-1 este martes con Colo Colo en su visita al estadio Monumental David Arellano, en el encuentro que disputaron por la ida de los cuartos de final de la Copa Libertadores.
River tuvo un inicio más intenso, con mucha movilidad en ataque y con Miguel Borja activo para buscar cada pelota que se aproximaba al área de los chilenos. El equipo de Marcelo Gallardo controló la mitad de la cancha, y presionó ante una posible salida de los rivales.
Pero de a poco fue perdiendo terreno en su propio campo con pelotazos largos, y Franco Armani tuvo que trabajar bastante, sobre todo con Carlos Palacios. Ante la imposibilidad de jugar en la mitad de la cancha, usó la velocidad del mediocampista para llegar al arco de River.
Cerca de los 33 minutos, Borja nuevamente apretó en la salida y ganó para quedar cerca del gol, pero se lo perdió por muy poco. Esta vez fue River quien quedó aislado de la zona de peligro, con un equipo local que monopolizó la pelota y jugó mejor de manera colectiva en el campo del conjunto visitante.
Colo Colo pudo haber reflejado el dominio en el campo en el marcador, cerca de los 40 minutos, ya que Arturo Vidal le cedió una pelota magistral a Javier Correa en la cabeza, pero Armani la sacó en el último suspiro con una gran tapada.
Y a los 43 minutos de la primera etapa, River respondió con una pelota parada con un gran central de Marcos Acuña, en un tiro libre desde la izquierda que capturó Pezzella tras desmarcarse con facilidad, y vencer al arquero Brayan Cortés. El árbitro esperó que sus colegas del VAR terminaran de revisar la jugada, en la cual se demostró que el defensor estaba bien habilitado.
En el inicio del complemento, Colo Colo mantuvo esa superioridad en el campo rival, ante un River que buscó el contraataque más que ir por el segundo tanto. De esta manera, el conjunto chileno llegó al gol tras un gran pase de Vidal para Palacios, quien definió ante la salida de Armani para el 1-1.
Ante este empate del club chileno, River entró en nerviosismo y sufrió más embates, pero de a poco el local se fue amoldando al resultado, y el equipo argentino pudo retomar el control de la pelota que tuvo en los primeros minutos del partido, aunque sin lastimar.
El final se vio desdibujado por las expulsiones de Paulo Díaz y Maximiliano Falcón, por agresión mutua en el área de los chilenos. El árbitro Claus adicionó siete minutos, y en ese momento Armani fue muy importante para evitar la caída de su arco.
La revancha entre ambos conjuntos se jugará el martes próximo en el estadio Monumental de Núñez. En casa de persistir la igualdad, la serie se definirá por remates desde el punto del penal.