Con la tranquilidad de haber gozado de algunos días más de descanso desde la caída 2-1 ante Racing en el Cilindro de Avellaneda, Boca se prepara para encarar el partido más importante del semestre. El sábado recibirá en La Bombonera a River, que viene de empatar 1-1 con Colo-Colo en Chile por los cuartos de la Copa Libertadores, en busca de una victoria que le brinde más oxígeno al ciclo de Diego Martínez como entrenador.
En vísperas del cotejo que será arbitrado Nicolás Ramírez, el técnico espera la evolución de dos jugadores clave, que podrían ser titulares pero practicaron de forma diferenciada, y se dirime entre tres opciones para ocupar el único lugar que está en duda, aunque la resolución modificaría el esquema entero.
El plantel se entrenó en el predio deportivo de Ezeiza y no hubo certezas sobre la formación. El conductor con pasado en Tigre paró dos equipos para un ejercicio de fútbol formal, uno con línea de cuatro defensores y otro con cinco, para no dar indicios del equipo, pese a que en la intimidad deslizan que la idea ya la tiene bastante clara.
Para Edinson Cavani y Kevin Zenón este miércoles fue fundamental. El delantero trabajó de manera óptima durante las últimas semanas, para recuperarse de su desgarro en el sóleo y llegar al ciento por ciento contra River. Si arriba sin dolor, cuenta con grandes posibilidades de ser titular y reemplazar a Milton Giménez, refuerzo del último mercado de pases que viene en un buen momento futbolístico gracias a sus cinco goles en 11 compromisos.
Por el lado del exUnión, había sufrido un golpe que lo obligó a entrenarse de forma diferenciada en la jornada matutina del martes, pero no está en duda para el sábado. La idea es que ya se pueda acoplar al resto de sus compañeros, y que realice los ejercicios con normalidad. No obstante, ninguno pudo sumarse completamente a la par del plantel.