Integrantes de comunidades indígenas de localidades ubicadas en el departamento Rivadavia, en el norte salteño, mantenían ayer la toma de las escuelas de ambos lugares con distintos reclamos.
Por un lado, fue tomada la escuela ubicada en La Puntana, en el municipio de Santa Victoria Este, en el extremo noreste de la provincia de Salta. Por el otro, está tomada la escuela de Coronel Juan Solá o Morillo, también en Rivadavia, en el sector conocido como Rivadavia Banda Norte, tomando como referencia el río Bermejo.
En el caso de la Escuela Tambor de Tacuarí, de Morillo, a la que asisten niños y niñas de la población wichí de este pueblo, padres y madres decidieron reiniciar la toma que habían realizado hace dos semanas por la falta de respuestas a compromisos asumidos por funcionarios del Ministerio de Educación de la provincia.
En este caso reclaman obras de mejora de los baños y la cocina. Actualmente la comunidad educativa de esta escuela solamente puede cocinar a leña. La población wichí que protesta afirmó que, a diferencia de lo que ocurre en su escuela, en otra a la que asisten niñas y niños criollos las obras de mejoras se están haciendo.
En La Puntana, en tanto, la toma de la Escuela N° 4216 Olof Fabián Severín Jonsson, fue iniciada por una parte de dos comunidades wichí el 11 de septiembre pasado.
El vocero de la protesta, Pablo Solís, contó a Salta/12 que la decisión se tomó ante la politización que se generó en el proceso de nombramiento de dos docentes bilingües.
Solís afirmó que desde hace unos cinco años hay dos personas propuestas por las comunidades (dado que este es uno de los requisitos para poder designar a estos docentes), y se había iniciado expediente a tal fin. Sin embargo, al momento de posesionar a los docentes “apareció José Rodríguez con el nombramiento de otras dos personas”, que no eran las que se habían propuesto desde un inicio, aseguró el vocero.
Rodríguez es el vocal del Pueblo Wichí dentro del Instituto Provincial de Pueblos Indígenas de Salta (IPPIS). Es por ello que su intermediación para los nuevos nombramientos se interpretó como una movida más parecida a una discrecionalidad por contactos políticos.
En las comunidades que rechazan estas designaciones se apuntó al Ministerio de Educación dado que se entendió que fue esta cartera la que dio “las herramientas” a Rodríguez para utilizar los nombramientos de manera política.
Los cuestionamientos también alcanzaron al actual director de la Escuela, del que la comunidad afirma que “parecería” que trabaja en política para Rodríguez. Solís dijo que ante las sospechas, piden que sea removido del cargo.
En cuanto a las personas nombradas sin acuerdo de estas comunidades, Solís reconoció que son dos docentes oriundas de La Puntana que están propuestas por otras comunidades más pequeñas de la zona, pero aseguró que las dos personas que quedaron fuera cuentan con el aval de las dos comunidades más grandes.
El director de Nivel Primario del Ministerio de Educación, Jorge Correa, afirmó ante este medio que "se designó a los postulantes que tenían los avales y la documentación correspondiente". Por otro lado, desde la cartera de Educación apuntaron a esta división en las propuestas de las comunidades de La Punta y afirmaron que tendrían una solución una vez que las comunidades se pongan de acuerdo.