”Es un sueño para mi dirigir a Newell’s, cuesta llegar y quiero permanecer”, afirmó Ricardo Lunari, el técnico asignado para intentar lo que no pudieron sus antecesores en el parque Independencia. “Los jugadores no tienen confianza para hacer lo que saben, hay que empezar por ahí para que Newell’s vuelva a ser Newell’s”, aceptó el flamante técnico leproso. Lunari llegó a Primera por su trabajo en Reserva. Pero la irrupción de los juveniles deberá esperar: “Ya sé los chicos que van a tener lugar pero no vamos a jugar con la Reserva”, aclaró. Mañana la Lepra recibe a Tigre y Lunari anticipa cambios en la idea de juego, una de ellas la posición de Ever Banega: “Va a jugar más adelantado, donde puede hacer más daño”, anticipó.
Rubén Capria presentó a Lunari con el deseo de que su trabajo no sea efímero en el primer equipo. El club necesita tener un entrenador por mucho tiempo y eso en el fútbol argentino se sostiene con resultados, en primer lugar, y alguna buena idea. Lunari lo asume. Pero no por eso oculta su deseo: "Siento que esto es un reconocimiento al trabajo que hice en la quinta división y Reserva. Siento que hoy Newell's me eligió, no sé si mañana, pero sí hoy. Para mi es un sueño y voy a hacer todo para ser el técnico oficial de Newell's”, expresó el ex volante leproso sin disimular el orgullo por la oportunidad que encontró en Bella Vista.
A diez años de su debut como técnico leproso --"en 2014 llegó por descarte", aceptó--, en un paso de solo siete partidos en el banco rojinegro, Lunari está de vuelta en el club por convocatoria del propio presidente Ignacio Astore a fines de 2022. “Nacho (Astore) me llamó cuando estaba en el Mundial de Qatar y le dije que sí, que me pusiera donde sea, que quería estar en Newells'. Por eso parece corto este lapso de tiempo desde que volví al club, pero hicimos mucho en las inferiores y gracias a los chicos que estuvieron conmigo hoy estoy acá".
"Voy a hacer todo lo posible para aprovechar esta oportunidad. Hacía un par de años que soñaba con esta posibilidad pero la veía muy lejana. Miraba como un poquito de celos o envidia a quienes tomaban el cargo, pero estoy acá y les agradezco a todos los que me apoyaron”, valoró el sucesor de Sebastián Méndez.
Mañana a las 19 el rojinegro recibe a Tigre, dirigido por Sebastián Domínguez. Para Newell’s los objetivos son básicos: “Recuperar confianza y dar pequeños pasos”, aceptó Lunari. ”Somos conscientes de que nadie es mago y cambiar de la noche a la mañana es muy difícil, pero sueño con un par de pasitos adelante ante Tigre. Hasta que aprendamos a jugar de igual a igual con cualquiera y recuperemos la confianza, será así”, precisó.
“No sé va a ver al equipo como a mí me gustaría, pero sí iremos paso a paso. Va a haber un cambio de sistema y nombres. No es por vender humo, sino porque nos va a dar un equipo que entendemos puede rendir más. A todo el plantel les falta la tranquilidad para intentar hacer lo que antes era normal. Tengo que lograr que cada uno se sienta cómodo en el lugar que lo ponemos en la cancha. Newell's no puede ganar de cualquier manera sino con fútbol”, explicó Lunari.
"No puedo meter a toda la Reserva (ayer ganó a Talleres y sigue líder) como dicen algunos. No los quiero quemar ni apurar a los chicos. Sé con quién puedo contar ya. Ahora estoy conociendo al plantel de Primera en profundidad. Pero habrá cambios. A Ever (Banega) hay que rodearlo para que juegue en una posición más alta, donde pueda hacer daño. Vamos a tratar de que juegue mas adelante y jugar la pelota por abajo", destacó por último el nuevo entrenador de Newell's.