La provincia de Santa Fe adherirá a dos normas clave del gobierno libertario: el blanqueo de capitales y el Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI). Así lo anunciaron ayer los ministros de Economía, Pablo Olivares, y de Desarrollo Productivo, Gustavo Puccini, quienes aseguraron que en ambos casos la adhesión será “a la santafesina”, aunque no brindaron detalles técnicos de las leyes que deberá tratar la Legislatura a partir de octubre.

Las dos leyes aprobadas por el Congreso nacional –las primeras que obtuvo La Libertad Avanza (LLA)- conforman el corazón del programa económico libertario que, como les ocurrió a otros gobiernos, carece de reservas de divisas. Milei y el ministro de Economía, Luis Caputo, apuntan a engordar las arcas del Banco Central con dólares provenientes de esos dos orígenes.

De los dos proyectos, el que más escozor genera en Santa Fe es el relativo al blanqueo de capitales, atento a que en la regularización de dinero en efectivo o inmuebles podrían colarse recursos provenientes de mercados ilícitos, como el narcotráfico.

Olivares explicó ayer, en la Bolsa de Comercio, donde realizó el anuncio, que la decisión de la provincia es, junto con el envío de la Legislatura de la Ley Tributaria, “incorporar un capítulo de blanqueo que adhiera, para dar certeza jurídica a aquellos que blanqueen, pero con las particularidades que vamos a pensar desde Santa Fe”.

El funcionario aclaró que se realizarán los controles previstos por la propia ley para evitar que ingresen quienes tengan vinculación con el lavado de activos: “Vamos a controlar que quienes ingresen al blanqueo sean solamente aquellos que eludieron cuestiones fiscales meramente”.

Si bien no brindó detalles, señaló: “Desde nuestra cartera estudiamos cómo guardar ecuanimidad entre aquellos que estén adhiriendo hoy y aquellos que han sido cumplidores”. El objetivo, dijo, es buscar algún modo de compensación para quienes sí tuvieron sus bienes registrados y pagaron impuestos por ello.

“No queremos que esto signifique una carga tributaria adicional sobre el total de los contribuyentes, sino que se busque una compensación con el que cumplió”, concluyó.

El blanqueo aprobado por el Congreso establece un mínimo o imponible, en dinero o bienes, de 100 mil dólares. Por debate de ese monto no se pagarán penalidades. Hasta fin de septiembre, por encima del mínimo, quien registre lo que no tenía declarado abonará una alícuota del 5% por sobre el excedente, que se convierte en 10% si lo hace antes de fin de año, y salta a 15 si aguarda hasta el 31 de marzo del próximo año.

En cuanto a la adhesión al RIGI, Puccini dijo que “es una oportunidad” para la provincia. Recordó que en el debate parlamentario “conseguimos algunas modificaciones en el texto original que van en favor de las empresas y sector productivo santafesino”.

 

Mientras que Olivares dijo que “es una manera de propiciar con certeza las grandes inversiones, no solamente las que se den en Santa Fe, sino también inversiones en otras provincias, pero que empresas santafesinas sean proveedoras de esas grandes inversiones”. Y aclaró que la provincia no aprovechará los beneficios impositivos del RIGI para agregarle carga arancelaria propia.