"La Universidad de las Madres es el blanco perfecto de una derecha reaccionaria que no quiere educación pública ni Memoria, ni Verdad, ni Justicia", aseguró Axel Kicillof este viernes en una clase magistral que lo tuvo como protagonista y en la que volvió a apuntar al Gobierno nacional por su ataque a la educación pública. Cada uno de los golpes que la gestión libertaria da a los sectores de derechos humanos y los centros educativos, señaló el gobernador son parte de "una estrategia para evitar poner en escena el foco de las verdaderas problemáticas que enfrenta el país".
"La embestida no es contra un edificio, sino contra nuestra historia y contra todo lo que representa el sistema universitario nacional", consideró Kicillof en la sede de la Universidad de las Madres de Plaza de Mayo (UNMa).
En su charla titulada “La autonomía de la Universidad de las Madres se defiende”, el gobernador estuvo acompañado por la rectora Cristina Caamaño y las Madres de Plaza de Mayo, mientras que expresó una firme condena a los intentos del Gobierno nacional por debilitar no solo a esta institución, sino a todo el sistema universitario público.
El gobernador señaló que la UNMa, al igual que las demás universidades públicas, se encuentra bajo ataque por ser un símbolo de la lucha por la memoria, la verdad y la justicia como parte de un discurso lleno de “odio y violencia” que se contrarresta con “organización”. "No nos sorprende", dijo, "porque les molesta que siendo pública, autónoma y gratuita sea un ámbito académico de excelencia".
Durante su exposición, el mandatario provincial hizo énfasis en que la universidad pública representa un instrumento de desarrollo tanto individual como social, y que su defensa es esencial para mantener viva la promesa de un país inclusivo. “Quieren destruir la universidad pública porque es un motor de progreso”, advirtió, recordando la masiva movilización de este año que salió en defensa de este derecho y la próxima programada para el 2 de octubre.
En ese contexto, Kicillof se refirió a los intentos de las autoridades nacionales por desviar la atención a través de ataques a sectores clave de la sociedad. . A su vez, Kicillof denunció que la derecha utiliza “discursos de odio y violencia para consolidar su agenda y neutralizar las resistencias sociales”.
El virus del odio
Uno de los momentos más destacados de la clase fue cuando el gobernador se refirió a la publicación del presidente Javier Milei en redes sociales, en las que comparaba al peronismo con un virus. “Es muy serio y muy grave", aseguró, "ya que esta metáfora ha sido utilizada en la historia para justificar las peores atrocidades”. Según el gobernador, las palabras del presidente no solo evocan un discurso peligroso, sino que fomentan un clima de violencia en la sociedad.
Kicillof destacó que este tipo de retórica, proveniente de las más altas esferas del poder, contribuye a la escalada de odio en el país. “Es imposible no ver la conexión entre el discurso de odio que se promueve desde las autoridades y las expresiones de violencia que emergen en distintos sectores”, afirmó. Frente a este escenario, para el gobernador la respuesta ante este tipo de ataques es clara y tal como enseñaron las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo: “Hemos aprendido que a la violencia no se le responde con más violencia, sino con organización y lucha pacífica”.
Siguiendo por la misma línea, Kicillof también criticó la actitud de Milei de comparar a su oposición con una enfermedad contagiosa, considerándolo un acto que atenta contra los principios democráticos. "Es espantoso que esto ocurra en un marco democrático", advirtió, y agregó que el país no puede permitirse tolerar este tipo de discursos que solo buscan profundizar la división y la violencia.
El ataque a la UNMa
Durante su exposición, Kicillof se refirió al ataque específico que enfrenta la Universidad de las Madres, que ha sido intervenida por el Gobierno nacional. Esa intervención, que arrancó en julio de este año con la designación de un rector organizador, Eduardo Maurizzio, y la exclusión de los trabajadores de las instalaciones, fue un duro golpe para la comunidad educativa. Además, la casa de estudios dejó de recibir el presupuesto correspondiente, lo que afectó el pago de salarios desde enero.
En ese contexto, la rectora señaló que este “avasallamiento es parte de una estrategia más amplia de debilitamiento de la educación pública” y, por eso, celebró el ceuntro que "reafirma la voluntad de resistencia", destacando que la comunidad educativa de la UNMa no dará un paso atrás ante los intentos de desmantelar la universidad.
La situación de la universidad alcanzó un punto crítico cuando, el 2 de septiembre, la Policía Federal impidió el ingreso de estudiantes y trabajadores a la sede, lo que provocó una fuerte reacción en redes sociales y una concentración de apoyo en las puertas de la universidad.
Durante el operativo policial, un grupo de alumnos y miembros de la comunidad educativa, incluida la rectora Caamaño, quedaron encerrados dentro de la sede. Ante esta situación, se presentó un habeas corpus por privación ilegítima de la libertad. El repudio a esta acción fue inmediato, y la policía se retiró horas más tarde ante la presión social.
Kicillof calificó estos ataques como un intento claro del Gobierno de Milei de asfixiar a la universidad y todo lo que representa. “Quieren que desaparezca porque no encaja en su modelo de país”, afirmó. Además, señaló que esta embestida es solo una muestra más de los intentos del Gobierno nacional por desmantelar todo el sistema universitario público, una de las instituciones más importantes para el desarrollo y la inclusión social en Argentina.
La resistencia ante el odio
El gobernador concluyó su clase magistral haciendo un llamado a la organización y a la lucha pacífica para defender a la Universidad de las Madres y, por extensión, a todo el sistema universitario público. “No vamos a bajar los brazos, seguiremos luchando para mantener viva la llama de la memoria, la verdad y la justicia que nos dejaron las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo”, completó.
El evento contó con la presencia de diversas figuras políticas y sociales, como el ministro de Trabajo, Walter Correa; el diputado nacional Daniel Gollan; la legisladora porteña Victoria Montenegro; el intendente de Ensenada, Mario Secco; y el secretario general de la CTA Ciudad de Buenos Aires, Daniel Catalano; entre otros. Todos ellos expresaron su apoyo a la universidad y su rechazo a los ataques del Gobierno nacional.