El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aseguró que el candidato de la oposición, Edmundo González Urrutia, le pidió "clemencia" para salir del país, al tiempo que negó que haya habido algún tipo de coacción por parte del gobierno contra el antichavista para concretar su partida a España. Maduro respondió así al opositor, que el miércoles denunció haber sufrido "coacción, chantajes y presiones" que lo llevaron a firmar una carta que permitió que le otorgara el salvoconducto para tomar el vuelo en un avión de las Fuerzas Aéreas españolas que finalmente lo llevó desde Caracas hasta Madrid, donde pidió asilo político.
"Su moral la perdió para siempre"
Durante un acto transmitido por el canal estatal Venezolana de Televisión, Maduro dijo: "Me da pena ajena que usted señor González Urrutia, que me pidió clemencia a mí, no tenga palabra, que no tenga palabra con lo que se empeñó y alegue su propia torpeza y su propia cobardía para tratar de salvar yo no se qué". El candidato de la Plataforma Unitaria Democrática (PUD) asegura que la carta fue presentada por representantes del gobierno bajo la amenaza de que si no la firmaba se tendría que "atener a las consecuencias", una "coacción" que, en su opinión, anula el texto.
Sin embargo Maduro reiteró que no hubo presiones, sino que, como dijo el presidente del Parlamento, Jorge Rodríguez, se trató de una negociación cordial, solicitada por González Urrutia. "Nadie puede alegar su propia cobardía y su propia traición a sus seguidores. Yo no se qué va a salvar porque ya su moral la perdió para siempre, y aquí estamos los venezolanos que sí estamos en Venezuela dispuestos a seguir trabajando por esta tierra, por esta patria, por la paz, por la vida y por el desarrollo real de nuestra república", subrayó el líder chavista.
Rodríguez dijo este jueves que la misiva en cuestión fue una "capitulación" del opositor, quien denunció fraude en las elecciones del 28 de julio, en las que Maduro fue proclamado ganador por el Consejo Nacional Electoral (CNE) con base en unos resultados que aún se desconocen de forma desagregada. Desde entonces se desató una crisis política en el país, alentada por la denuncia de fraude de González Urrutia, quien se autoproclama ganador de los comicios.
"No he sido coaccionado ni por el gobierno de España ni por el embajador español en Venezuela", señaló González Urrutia en una carta que fue publicada el jueves por el ministro de Asuntos Exteriores español, José Manuel Albares, en su cuenta de la red social X. "Las gestiones diplomáticas realizadas" por España "tuvieron como único propósito facilitar mi salida del país, sin ejercer ningún tipo de presión sobre mí", continuó el opositor venezolano en la misiva.
Cortocircuitos con la ONU
La líder de la oposición venezolana, María Corina Machado, dijo que González Urrutia abandonó Venezuela porque fue forzado, ya que sufrió "un terrible hostigamiento y amenazas a su vida". Machado intervino el viernes de forma telemática en la sesión que el Consejo de Derechos Humanos dedicó a Venezuela y en la cual la Misión de Determinación de los Hechos de la ONU para este país presentó su último informe, que sostiene que "el riesgo de desintegración del Estado de derecho es muy alto".
El Ministerio Público de Venezuela advirtió que ese documento presenta información "sesgada", "incontrastable" y sin "detalles ni evidencias" que "permitan su revisión". Maduro habló este viernes por teléfono con el secretario general de la ONU, António Guterres, quien le expresó "su preocupación por la violencia postelectoral y por las acusaciones de violaciones a los derechos humanos" en el país caribeño.
La llamada fue por iniciativa del presidente venezolano, explicó en su rueda de prensa diaria el vocero de Guterres, Stéphane Dujarric. En la conversación Guterres insistió a Maduro en que es necesario "resolver cualquier disputa política pacíficamente a través de un diálogo genuino e inclusivo". El vocero no explicó cuál fue el mensaje que transmitió Maduro, pero dijo que "habló de manera muy clara y franca sobre cómo ve la situación", ante lo cual Guterrres "tomó nota".