El seleccionado argentino dio vuelta un parcial de 17 a 0 para quedarse con el triunfo ante los Springboks por 29 a 28 en el Estadio Madre de Ciudades de Santiago del Estero. De esta forma el cierre del torneo será la próxima semana en Nelspruit ante Sudáfrica.
Sudáfrica llegó a Santiago del Estero con la mente puesta en seguir cosechando éxitos. El equipo de Rassie Erasmus llegaba de cosechar cuatro victorias consecutivas y enfrentaba a unos Pumas que, si bien no habían conseguido lograr la regularidad deseada, lograron dos victorias resonantes en el torneo. La primera en el debut en Nueva Zelanda ante el equipo local por 38 a 30 y la segunda en Santa Fe en un partido que quedó en la historia por ser el de mayor cantidad de puntos que recibió Australia (67-27). Ahora ambos equipos iban en busca de un nuevo triunfo. Los Springboks para consagrarse como los campeones y repetir el título conseguido en el 2019 y Los Pumas para albergar la esperanza de llegar al último partido con la chance intacta de poder viajar a Nelspruit, tierra sudafricana, con la posibilidad matemática y la ilusión de ganar el torneo por primera vez en la historia.
Un primer tiempo de menor a mayor
El conjunto argentino comenzó con varias imprecisiones en Santiago del Estero y dejó que Sudáfrica le marcara puntos fáciles en los primeros minutos. El back Aphelele Fassi encontró un hueco en la defensa Argentina y se zambulló en el ingoal. A los pocos minutos, el centro Jesse Kriel expuso los errores del equipo dirigido por Felipe Contepomi en la marca y el tackle, y el apertura Handre Pollard volvió a sumar la conversión para el 14 a 0. En la siguiente el apertura aportó un penal y el equipo dueño de casa se encontró en un cuarto de hora 17 a 0 abajo en el marcador.
Pero hizo un click en el momento justo. Los Pumas comenzaron a darle dinámica a su juego y a mover al pack de delanteros pesados sudafricanos. Mateo Carreras apretó el turbo y logró la primera conquista para los albicelestes.
El elenco visitante mostró signos de cansancio y cayó en errores propios. Kurt-Lee Arendse vio la tarjeta amarilla por un tackle alto. El conjunto argentino siguió lastimando y logró dos conquistas sucesivas para aprovechar el hombre de más. Así llegaron los tries de Pablo Matera y Joel Sclavi. Los Pumas ya eran otros y se notaba. El público en el Estadio Madre de Ciudades empujaba también y el intenso calor se hacía notar cada vez más.
El apertura argentino, Tomás Albornoz, aportó dos de las tres conversiones y desperdició un penal desde mitad de cancha. Pero la revancha para el tucumano llegó rápido, ya que logró apoyar el cuarto try argentino y añadir la conversión para pasar al frente por 26 a 17 tras ir abajo 17 a 0. Sin embargo, sobre el final del primer tiempo, el medio scrum de los Springboks, Cobus Reinach, durmió a la defensa albiceleste tras un quedo importante y con un avivada acercó a su equipo en el score para cerrar el primer período con Los Pumas 26 a 22 arriba. Luego de un comienzo adverso, los argentinos se demostraron que podían nada menos que ante el campeón del mundo en un electrizante primer tiempo que será para recordar.
Segundo tiempo con dientes apretados
Fue un segundo tiempo no apto para cardíacos. De arranque nomás Handre Pollard marcó un penal a los pocos minutos de haber comenzado el complemento. Sudáfrica se mostró un poco más cómodo, y apeló a su poderío físico y a su juego con el pie.
Los Pumas intentaron, pero volvieron a estar imprecisos. Albornoz falló otro penal y no logró estirar la diferencia. El apertura estuvo bien en la conducción del equipo y en los kicks durante el desarrollo del juego, pero sólo le faltó afinar algunos disparos a los postes.
Manie Libbok ingresó y puso a su equipo arriba con otro penal para dejar el score 28 a 26 para los bicampeones del mundo. El equipo dirigido por Felipe Contepomi generó un buen ataque con sus backs que derivó en un penal a favor, que anotó Albornoz para volver a poner arriba al equipo de Felipe Contepomi por la mínima (29-28).
El partido era otro que el de la primera mitad, más duro, más disputado, sin tanto ataque y con más defensas y así se fueron pasando los minutos. Quedaban 10 y Los Pumas le ganaban a Sudáfrica en otra muestra de que los triunfos ante Nueva Zelanda y Australia no habían sido casuales.
Los últimos cinco minutos fueron apasionantes. El equipo argentino tuvo dos lines en las 22 yardas rivales, pero los dirigidos por Rassie Erasmus respondieron con inteligencia y zafaron. En la siguiente, Sudáfrica avanzó en el campo argentino y forzó un penal accesible para Libbok, pero el apertura desvío su remate y le otorgó la victoria al seleccionado argentino.
Fue final y triunfo para Los Pumas, por 29 a 28, para dejar atrás el fantasma del partido ante Australia de La Plata (que distinto hubiera sido hoy con la tabla igualada).
De todas formas, con este triunfo los dirigidos por Felipe Contepomi lograron ganarle a los tres rivales en un mismo torneo. Ahora con esta victoria viajarán a Sudáfrica en busca de la hazaña histórica de quedarse con el título del Rugby Championship frente al bicampeón del mundo en su casa.
El sábado en Nelspruit Sudáfrica irá por la revancha y Los Pumas nos invitarán una vez más a soñar, mientras tanto esta noche solo queda tiempo para festejar y disfrutar de este 29 a 28 ante los bicampeones del Mundo