El secretario general del gremio de Obras Sanitarias, Silvio Barrionuevo, salió a responder las acusaciones de la directora de la empresa Aguas Santafesinas SA Anahí Rodríguez, que lleva adelante un duro ajuste en la prestadora y que acaba de anunciar que no abonará más un histórico pago extra, que calificó como "premio". “Se jactan de reducir en casi 9 mil millones la masa salarial en sueldos de trabajadores activos, mientras cuentan con 70 jerárquicos que cobran más de 4.000.000 de pesos”, arremetió Barrionuevo. El gobierno de Maximiliano Pullaro que planea ajustes de todo tipo en la administración provincial, puso la lupa en achicar el déficit en la firma estatal. Una ofensiva que también se evidencia en la Empresa Provincial de la Energía (EPE).

Anahí Rodríguez, que responde al socialismo aliado del gobernador en el frente Unidos, había asegurado que en Aguas Santafesinas reinaban "la desidia y el descontrol”. Y aseguró que cuando ingresaron al directorio el sindicato tenía montado un “picnic” en las instalaciones de la empresa. Afirmó que Obras Sanitarias buscaba un mecanismo de “cogestión” en medio de una conducción marcada por el “desorden y la falta de conducción". También criticó a sus antecesores al mando de la firma estatal y dijo que en el último directorio había “un exceso de autonomía de la empresa respecto de la política provincial”.

La tensión entre las partes fue escalando en los últimos meses y ahora volvió a tensarse con un anuncio del Ejecutivo: no abonará más un histórico pago extra, que calificó como premio, que para los empleados sanitaristas es una “bonificación por indemnización de acciones de la superada gestión privatizada”. El secretario general del gremio, Barrionuevo, contestó con munición gruesa: “Se jactan de reducir en casi 9 mil millones la masa salarial en sueldos de trabajadores activos, mientras cuentan con 70 jerárquicos que cobran más de 4.000.000 de pesos”, dijo en declaraciones a El Ciudadano.

El foco de Rodríguez está puesto en lo presupuestario: señaló que cuando ingresaron había empleados que tenían registro de haber trabajado 40 horas extras en un solo día. Según su relevamiento, las planillas marcaban eso para no elevar la categoría de los empleados y de igual manera pagarles más.

En las últimas horas desde Assa también informaron que el Tesoro provincial aportará 85 millones de dólares para un plan de obras que contempla el recambio de cañerías de agua y cloacas en Rosario y Santa Fe principalmente, en un plazo de 30 meses, para renovar infraestructura que data del siglo pasado. Y destacaron que buscan eficiencia en el consumo y el servicio: hoy se pierde el 40 por ciento del agua que producen y la atención de los reclamos no cumple con el plazo que establece la ley.

Barrionuevo, en su doble rol de titular de los sanitaristas y de director obrero de la sociedad anónima de capital estatal, aseguró que “hoy existe una confrontación clara entre la presidencia de la empresa y el sector de los trabajadores que represento, por la que pretende incumplir arbitrariamente obligaciones que paradójicamente fueron establecidas en un gobierno de gestión socialista y existe una gran diferencia con el liderazgo que pretende ejercer la actual presidenta”.

El titular del gremio explicó que acuerdan con la decisión de Pullaro de bajar el déficit: “Siempre tratamos de construir acuerdos mediante el dialogo, pero esta presidenta viene tomando una actitud verdaderamente inadmisible. Desde el sindicato venimos acompañando la convicción del gobernador de sanear la empresa, dada la crítica situación financiera en la que estaba. Por eso, si bien existen muchas cuestiones pendientes en relación a las condiciones laborales, decidimos con la comunidad sanitarista enfatizar en las cuestiones de mayor urgencia, y continuar resolviendo el resto pero de manera progresiva. Pero a pesar de nuestra entera predisposición, está clara la intencionalidad de la presidenta de atacar la representación gremial para justificar sus posiciones”. Desde el sindicato señalan que “hay una estrategia de ajuste que atenta contra la prestación del servicio".

"Ahora se pone en duda el pago de la bonificación por indemnización de las acciones que reciben los trabajadores de la empresa, pero se suma a las urgencias delicadas en materia de seguridad laboral (entre ellas coches en estado deplorable con verificación técnica rechazada); ordenar el cumplimiento del Convenio Colectivo de Trabajo en cuanto a la inclusión del Sindicato en la discusión por despidos (recurrencia de despidos injustificados e inconsultos en las últimas semanas)", enumeró Barrionuevo.