La actividad manufacturera de las pymes descendió un 8,7 por ciento interanual en agosto y acumuló así una retracción de 16,9 por ciento en los primeros ocho meses del año frente al mismo periodo de 2023, según el relevamiento de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) en base a la información que brindan 414 industrias pyme a nivel federal. En la comparación mensual desestacionalizada, el resultado arroja una mejora del 3 por ciento, que "no representa una señal firme de cambio de tendencia o de reactivación", plantea el informe. En tanto, el uso de la capacidad instalada se ubicó en 60 por ciento en el octavo mes del año.
Las pymes mantienen fuertes problemas financieros. Según la CAME, el mes pasado el 16,7 por ciento de las pequeñas y medianas empresas industriales "reportaron complicaciones para cumplir con los sueldos del mes en curso".
Sectores
A nivel sectorial, alimentos y bebidas registró durante el mes pasado una caída de 10,8 por ciento anual a precios constantes y una mejora de 0,9 por ciento en la comparación mensual. Para los primeros ocho meses del año, acumula una baja de 16,4 por ciento anual. "Desde las industrias consultadas valoraron el impacto positivo de la mayor estabilidad de precios, pero también manifestaron la fuerte baja en los pedidos de producción, como consecuencia de que muchos distribuidores y comercios se fueron 'stockeando' y están reponiendo mercadería más lentamente", detalla la CAME.
En el caso de textiles e indumentaria, la producción se retrajo 3,6 por ciento anual en agosto y también cayó 0,9 por ciento frente a julio. En ocho meses, el sector suma una caída de 3,7 por ciento. "Hay preocupación por el ingreso de productos importados, especialmente en indumentaria de hombre y blanquería, un problema al que el sector se había desacostumbrado", indica la CAME.
El rubro de metal, maquinaria y equipo y material de transporte se contrajo el agosto un 4,8 por ciento en forma interanual, aunque creció 5,9 por ciento en la comparación mensual. Para los primeros ocho meses del año, acumula un declive del 18,6 por ciento. "En el sector notó un mayor movimiento, especialmente los que están orientados al agro y la construcción. En cambio, las firmas que trabajan vinculadas al sector petrolero tuvieron un comportamiento menos favorable", detalla el informe.
En otros rubros la situación no es muy distinta. Por ejemplo, maderas y muebles cayó en agosto 1,1 por ciento interanual y acumula una merma del 15,6 por ciento en lo que va del año, aunque la comparación frente a julio muestra una mejora del 4,3 por ciento. "La actividad del rubro se activó después de meses muy parados, impulsados por el recambio de mobiliario hogareño y el repunte en la construcción", dice la CAME.
En químicos y plásticos, la contracción interanual de agosto fue del 15,5 por ciento y el repunte mensual, del 2,1 por ciento. Para los primeros ocho meses del año, la caída acumulada es de 24,3 por ciento. "Aunque hay un segmento de empresas con buena dinámica, como el ramo más vinculado a vacunas y medicamentos, pero otros como los de pinturas y solventes se vieron más afectados. Lo mismo sucedió con productos plásticos, que tuvo un mes muy malo", analiza el reporte empresarial.
Por otro lado, la CAME relevó que el 16,7 por ciento de las pequeñas y medianas empresas industriales "reportaron complicaciones para cumplir con los sueldos del mes en curso". "Si bien esto muestra una leve mejora frente al mes pasado, donde se llevaba 8 meses a la baja y cuando el 19,3 por ciento de las firmas manifestó este problema, los niveles de estrés financiero son motivo de preocupación dentro de sectores clave para la economía", advierte el reporte. Los sectores con más dificultades para pagar los sueldos son alimentos y bebidas y textil e indumentaria, con un 22,8 por ciento y 21,1 por ciento de sus empresas, respectivamente.