Los cinco incendios forestales desatados de manera simultánea en Quito dejaron al menos seis heridos y 107 familias evacuadas, informaron las autoridades mientras los bomberos continúan trabajando para apagar el fuego.
"No tenemos ninguna persona fallecida", afirmó Carolina Andrade, secretaria de Seguridad del municipio quiteño, en declaraciones a la prensa local. Andrade añadió que, según la información preliminar disponible, "son cuatro personas heridas, dos adultos y dos menores de edad".
Antes, el alcalde Pabel Muñoz había reportado que dos bomberos resultaron heridos cuando realizaban tareas de evacuación.
Las quemas, presuntamente provocadas según las autoridades, se originaron en lomas de la periferia oriental de la capital, amenazando áreas residenciales como la exclusiva zona de la avenida González Suárez.
Andrade señaló que durante la emergencia, que obligó al despliegue de 2.000 bomberos, militares y socorristas, fueron evacuadas de manera preventiva 107 familias y que siete viviendas resultaron afectadas por el fuego, que el miércoles se concentraba en la parte alta del cerro Auqui.
En su más reciente balance, Muñoz dijo: "Ya estamos en proceso de liquidación" de las llamas. Y enfatizó: "No podemos bajar la guardia ni bajar los brazos", en referencia a los fuertes vientos y la vegetación seca a causa de la prolongada ausencia de lluvias, factores que podrían encender nuevos focos.
"El flagelo se ha venido controlando en algunos puntos críticos. Sobre todo, se ha dado prioridad a aquellos donde teníamos presencia de vivienda", anotó.
Este miércoles un denso humo aún cubría las zonas más afectadas, mientras que el olor a quemado inundó la capital, con casi tres millones de habitantes.
Las clases fueron suspendidas, mientras que entidades municipales y gubernamentales pasaron a teletrabajo debido a la "mala calidad" del aire en Quito, que desde hace tres semanas ha enfrentado sendos incendios forestales.
El municipio estima que el 99% de incendios en la capital son provocados.