Endeudamiento, cambio de hábitos en la compra de alimentos básicos y actividades extra son algunos de los métodos de mujeres y disidencias sexuales para hacer frente a la actual situación económica, según el informe "El impacto de la situación económica en mujeres y disidencias sexo-genéricas a cargo de tareas de reproducción social (cuidado de personas, domésticas y de gestión de sus hogares)". Se trata de un trabajo de investigación coordinado por el Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana (Isepci) ) de Santa Fe en el que participaron instituciones y organizaciones de distintos puntos de Rosario. Mayormente, las encuestadas poseen "ingresos precarios e inseguros, sin llegar a cubrir las necesidades básicas". En casi la mitad de las consultas, en los diferentes distritos, aparece la utilización de "algún método de pago que implica endeudamiento".
De las 221 personas encuestadas, el 75 por ciento dijo tener a cargo niños, niñas y adolescentes, en algunos casos combinados con personas adultas mayores o con discapacidad. Además, en la mayoría, su ingreso es el principal en el hogar. Asimismo, un 36% percibe ingresos sin identificar un “trabajo”, por lo que induce el informe que se trata de Programas Sociales o Asignaciones familiares.
Sobre el endeudamiento, el informe consigna que en su mayoría se da a través de préstamos de billeteras virtuales o préstamos barriales informales. "Se observa la multiplicación de 'herramientas financieras' informales o ilegales con escaso o nulo control del Estado que, por su naturaleza, buscan obtener rédito económico aprovechándose de la vulnerabilidad de las usuarias". Sumado a ello, agrega que más del 80 por ciento de las personas consultadas en la encuesta dijo estar "peor" que en diciembre pasado; y los sentimientos mayoritarios son de preocupación y angustia.
Al mismo tiempo, el 95 por ciento de las personas encuestadas modificó sus hábitos de consumo en compras del hogar. La gran mayoría adquiere productos de menor calidad o menor cantidad que antes. El principal rubro de ajuste es la vestimenta, pero el segundo ítem es el de los alimentos básicos, en una lista encabezada por la carne de vaca, quesos y fiambres. También figuran frutas, verduras y leche, lo que "muestra la gran dificultad que tienen muchas familias de acceder a una alimentación nutritiva y saludable, agravado por la decisión del gobierno nacional de eliminar el envío de alimentos a los comedores comunitarios", expresa el informe.
También se redujeron o eliminaron compras de comida preparada, suscripción a plataformas, actividades recreativas, compra de medicamentos, internet, compra de útiles escolares, entre otros.
Además, muchas de las personas consultadas dijeron desarrollar actividades extra para solventar gastos diarios, en su mayoría a través de la venta de comidas, artículos o ropa; cuidados y limpieza, tareas como manicuría, peluquería, electricidad; también, de juegos virtuales que "si bien están en debate por el crecimiento de la ludopatía en adolescentes y jóvenes, son históricamente una forma de supervivencia de sectores populares, cobrando más énfasis en momentos de crisis", reza el trabajo. En menor medida, aparece el cartoneo, la prostitución y venta de contenido erótico (4 y 2 casos, respectivamente).
La presentación del informe tuvo lugar en el Concejo Municipal y estuvo a cargo de Sofía Botto, directora del Isepci y dirigente de Libres del Sur en Rosario. “El Estado local debe implementar medidas de urgencia para acompañar a la ciudadanía en la actual situación económica, que se agrava diariamente como demuestran los datos: incremento de los niveles de pobreza, privación de acceso a los alimentos básicos, dificultades para adquirir vestimenta en buenas condiciones, y hasta restricciones de acceso a la educación y la salud. Todas las políticas de abordaje de la crisis deben implementarse desde la perspectiva de género, como lo analizamos en el informe”, señaló, acompañada por el concejal Leonardo Caruana del Frente Amplio por la Soberanía; Gabriela Sosa, directora ejecutiva de Mumalá; Ariel D’Orazio de la Concejalía Popular y Gabriela Cericola, del Sindicato de Luz y Fuerza Rosario, además de referentas de la Red de Mujeres del Sur, Asociación Vecinal Acindar, Mumalá Rosario, Asociación Civil Orillas, Libres del Sur Territorial, Encuentro por Rosario y Causa.