Aníbal Miguel Sánchez se pasó los últimos seis años prófugo. Se escapó cuando el juez federal Daniel Rafecas lo quería indagar por su rol en el Regimiento de Infantería (RI) 6 “General Viamonte” de Mercedes. Pero la semana pasada lo localizaron en Brasil, donde quedó detenido a la espera de que el país resuelva si lo extradita para que pueda ser juzgado en la Argentina por crímenes de lesa humanidad.