El bloque de concejales de Unión por la Patria en Mar del Plata presentó una denuncia contra el intendente Guillermo Montenegro, señalando la subejecución de los fondos destinados a la ayuda alimentaria en la ciudad. Según el informe presentado, el jefe comunal sólo utilizó el 15 por ciento de los recursos presupuestados para la compra de alimentos, en un contexto de creciente crisis alimentaria que afecta a gran parte de la provincia de Buenos Aires.
Ante la consulta de Buenos Aires/12, desde el gobierno local prefieren no brindar declaraciones al respecto, pero la oposición eleva la voz en medio de un situación en que el debate sobre la pobreza y la indigencia ocupa la centralidad de la discusión políca nacional.
"El hambre no puede esperar", sentencia Mariana Cuesta, llamando a una rápida respuesta del municipio. Ella es la presidenta del bloque de concejales de Unión por la Patria, y fue quien encabezó la denuncia que solicitó explicaciones formales al Gobierno de Montenegro.
"La subejecución de partidas es una característica constante de este gobierno, pero cuando se trata de la compra de alimentos, la situación es aún más grave", dice Cuesta, para quien resulta "inconcebible que, habiendo destinado 1.400 millones de pesos en el presupuesto 2024 para asistencia alimentaria, solo se hayan utilizado 212 millones".
En su denuncia, la concejal expuso que la utilización de los fondos es "extremadamente baja en comparación con la urgencia que se vive en las comunidades más vulnerables" de la ciudad. "Estamos ante un gobierno municipal que demuestra una total falta de empatía hacia quienes más lo necesitan", lanzó Cuesta, aludiendo a las crecientes cifras de pobreza e indigencia que afectan a Mar del Plata y su área de influencia.
Mar del Plata golpeada por la pobreza
Este jueves, el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) dio a conocer las cifras de pobreza correspondientes al primer semestre de 2024, mostrando que Mar del Plata se encuentra en una situación crítica. De acuerdo a los datos del Indec, el 46,2 por ciento de la población local vive por debajo de la línea de pobreza, lo que implica que unas 306.221 personas en la ciudad no logran cubrir sus necesidades básicas. De ellas, hay 85.825 personas que se encuentra en situación de indigencia.
“Desde el primer día del Gobierno de Javier Milei advertimos que estos iban a ser los resultados, hoy estamos frente a una tragedia social y no hay señales de que haya registro, ni reacción por parte del Gobierno nacional, lamentablemente todo indica que las cosas van a empeorar”, expresó Andrés Larroque, ministro de Desarrollo de la Comunidad bonaerense luego de revisar el informe del INDEC.
Estos números representan un aumento significativo respecto al semestre anterior, cuando la pobreza alcanzaba el 37,7 por ciento de la población. El incremento refleja el impacto de la crisis económica y el recorte de asistencia social para atender las necesidades básicas de la población más afectada.
En ese contexto, Cuesta destacó este contexto para remarcar la gravedad de la denuncia: "Los datos de pobreza no son sólo números, son personas que están sufriendo. Mientras tanto, el gobierno local subejecuta los fondos que deberían estar destinados a paliar esta situación. Esto es inadmisible".
Es esa situación general la que generó que Unión por la Patria presentase un pedido de informes en el Concejo Deliberante de Mar del Plata para exigir explicaciones al Ejecutivo municipal. En el documento, solicitan que el intendente Montenegro y su equipo expliquen las razones detrás de la subejecución de las partidas destinadas a la compra de alimentos y cuáles son los planes para corregir esta falencia en lo que resta del año.
"No estamos pidiendo un plan integral, aunque sería lo ideal, simplemente queremos que se cumpla con lo que se prometió en el presupuesto, porque la gente necesita comida, y no podemos permitir que el gobierno municipal se desentienda de esta realidad", enfatizó Cuesta.
La Mesa de Diálogo y la emergencia alimentaria
Previamente a la denuncia de los concejales de Unión por la Patria, la Mesa de Diálogo por la Dignidad de las Periferias, integrada por diversas organizaciones sociales, la Iglesia Católica, sindicatos y universidades, presentó un pedido para que se declare la emergencia alimentaria en el partido de General Pueyrredón del cual. Esta iniciativa busca agilizar la asignación de recursos para los comedores y merenderos que asisten a las familias más necesitadas de la ciudad.
Ana Laura Vulcano, coordinadora de la Mesa de Diálogo, brindó una detallada descripción de la situación en Mar del Plata y el pedido presentado ante el Concejo Deliberante. "Estamos ante una ciudad hermosa que algunos pueden disfrutar, pero muchos otros no. Hay hambre en la ciudad, y eso no se puede ignorar", dice Vulcano.
"Como Mesa de Diálogo, lo único que pedimos es que el Estado actúe con compasión y empatía frente al sufrimiento de las personas más vulnerables", señala al ser consultada por este medio.
El pedido de emergencia alimentaria está acompañado por un informe al que tuvo acceso este medio y que subraya la necesidad de que el municipio de General Pueyrredón focalice sus esfuerzos en las áreas más vulnerables. "Durante la pandemia, el municipio distribuía 20.000 kilogramos de alimentos frescos cada semana, hoy en día, esa cifra se ha reducido drásticamente, y muchas personas que antes recibían asistencia quedaron desprotegidas", indica una parte del informe haciendo referencia a esta situación.
De este modo, y con este panorama, Vulcano dice que los datos proporcionados por los concejales de Unión por la Patria reflejan lo que ya se observa en los comedores comunitarios y merenderos. La coordinadora subrayó que la situación de hambre es una realidad palpable, y confía en que se aprobará la declaración de emergencia. "No podrían oponerse a algo que es tan evidente. Esta es una cuestión social que trasciende lo partidario", afirmó.
Un problema estructural
La situación de Mar del Plata es, en muchos sentidos, un reflejo de la crisis alimentaria que afecta a todo el país y la Provincia de Buenos Aires. Los sectores más golpeados son aquellos que ya enfrentaban dificultades antes de la pandemia, y la actual precarización del empleo ha exacerbado la vulnerabilidad de miles de familias.
Desde Unión por la Patria, insisten en que la subejecución de los fondos destinados a la ayuda alimentaria es solo un síntoma más de una gestión que prioriza la imagen política por sobre las necesidades de los ciudadanos. "Montenegro está más interesado en alinearse con el gobierno de Milei que en cumplir con las promesas que hizo a los vecinos de General Pueyrredón. Es hora de que deje de lado los intereses partidarios y se enfoque en resolver los problemas que afectan a la gente", sentencia Cuesta.
A lo largo de la crisis alimentaria, las organizaciones sociales, la Iglesia y los movimientos barriales han asumido un rol crucial en la asistencia a las familias más afectadas. Sin embargo, tanto Vulcano como Cuesta coinciden en que el Estado debe reforzar su presencia y apoyo.