Al cierre de esta edición, la Cámara de Diputados daba media sanción al proyecto que Patricia Bullrich llama pomposamente "Ley Anti mafias" aprobado por 137 votos a favor y 92 en contra. La iniciativa propone una reforma el Código Penal para penalizar de la misma forma a todos los miembros de las organizaciones criminales. Es decir que la pena más alta que recibe un miembro de la organización delictiva será aplicada también para el resto de los integrantes de la banda. Más allá del nivel de participación que el acusado haya tenido en la banda.
El proyecto aprobado, sin embargo, no saldría tal cual lo redactó la ministra de Seguridad, que viene teniendo serias dificultades para aprobar sus iniciativas en el Congreso. Uno de los problemas del texto era que en ninguna parte terminaba de tipificar al sujeto que se estaba persiguiendo, ya que por más que hablaba de "mafias" se incluía delitos muy variados. La versión original comprendía desde el tráfico de estupefacientes, lavado de activos o trata de personas hasta delitos como intimidación pública o amenazas. "El 14 por ciento del código penal se aplica para esta ley. Hasta las lesiones leves que tienen una pena de un mes a un año de prisión", cuestionó, en un momento, el diputado massista Ramiro Gutiérrez (UxP).
Encuentro Federal y un sector de la UCR se negaba a acompañar la iniciativa tal cómo estaba, por lo que el oficialismo tuvo que negociar quitar algunos delitos, como amenazas.
El proyecto, sin embargo, crea también la figura de la Zona de Investigación Especial, que habilita a las fuerzas de seguridad a detener a una persona por 48 horas por averiguación por la comisión de determinados delitos. Y, si hay una autorización judicial, esta detención podría extenderse por 15 días.