El sub inspector Andrés Farías, quien recibió varios disparos durante una salidera el viernes pasado en Fisherton, falleció ayer luego de varios días internado en el Heca. El policía ingresó al centro de salud con graves heridas en la cabeza y en el tórax. Farías, de 41 años, estaba haciendo adicionales como custodio para una empresa de golosinas, cuando recibió trece disparos de parte de delincuentes que huyeron con dinero. Según explicó el fiscal Matías Merlo, los delincuentes dispararon al menos trece veces contra la Kangoo que trasladaba la recaudación del Emporio de Golosinas, en la intersección de Wilde y Benegas, y las balas hirieron al policía, que se encontraba al interior del vehículo junto al tesorero de la empresa. Por el hecho todavía no hay detenidos.