Al cierre de esta edición, Paul McCartney estaba a toda marcha en el escenario de River Plate, efectivizando la primera de sus dos noches en el Monumental en esta nueva visita. A las 21.15, el bajista y cantante provocó la explosión de un estadio repleto con el clásico de The Beatles "A Hard Days' Night", iniciando una cabalgata de casi 40 canciones repartidas entre su legendaria banda liverpuliana, Wings y su carrera solista.