El alcalde de San Pablo, Ricardo Nunes, respaldado por el exmandatario ultraderechista Jair Bolsonaro, buscará la reelección en el balotaje contra el diputado Guilherme Boulos, candidato apoyado por el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, tras los comicios municipales de este domingo.

Nunes obtuvo un 29,49 % de los votos, frente al 29,06 % que logró Boulos, en una de las contiendas más empatadas de las últimas décadas en la capital paulista y que sólo se definió con el 99,52 % del escrutinio completado, según los datos del Tribunal Superior Electoral (TSE).

El influencer y empresario ultra Pablo Marçal, que dividió el campo de la extrema derecha con un estilo predominantemente belicoso y provocador, finalmente se quedó, por muy poco, fuera de la segunda vuelta, al terminar en tercer lugar, con un 28,14 % de los sufragios.

Una diferencia de unos 55.000 votos impidió que este gurú que se hizo conocido en las redes sociales dando charlas motivacionales sobre cómo ganar dinero fácil avanzase a la segunda vuelta. 

Más lejos se quedaron la diputada socialista Tabata Amaral (9,92 %) y el presentador de televisión José Luiz Datena (1,84 %), quien en un debate de televisión agredió con una silla a Marçal.

La segunda vuelta de las elecciones en San Pablo, motor económico de Brasil y mayor colegio electoral del país, con 9,3 millones de votantes, se celebrará el próximo día 27.

La campaña en la capital paulista ha sido una de las más crispadas, con episodios de violencia entre los candidatos y sus asesores en dos de los debates realizados.

Boulos ya estuvo en la segunda vuelta de las municipales de 2020, aunque en esa ocasión perdió frente a Bruno Covas, quien falleció un año después víctima del cáncer, momento en el que asumió Ricardo Nunes.

Para esta cita logró el apoyo de Lula, un gesto histórico, pues ha sido la primera vez desde la vuelta a la democracia, en 1985, que el Partido de los Trabajadores (PT), que fundó Lula, renunció a tener candidato propio en la capital paulista.

Líder del movimiento de los sin techo y diputado federal del Partido Socialismo y Libertad (PSOL), Boulos llamó a la unidad por "el cambio" para hacer una ciudad "más justa, más civilizada y más segura".

"Nuestro proyecto es hacer una ciudad para todos, más humana", dijo poco antes de oficializarse los resultados.

Nunes, empresario y militante del Movimiento Democrático Brasileño (MDB), "se derechizó" y obtuvo el respaldo tibio de Bolsonaro en la campaña.

En este último año de mandato puso en marcha un vasto plan de mejoras de infraestructuras y, con la maquinaria pública a su favor, consiguió captar el voto de centro-derecha.

Sin embargo, el outsider Marçal puso en riesgo su proyección, captando el voto de feligreses evangélicos, electores de extrema derecha y aquellos descontentos con su gestión.

Tras el escrutinio, Nunes agradeció primero a Dios por el resultado en la primera vuelta, después al gobernador de San Pablo, Tarcísio de Freitas, y finalmente a Bolsonaro.

Brasil celebró este domingo elecciones municipales para elegir a los alcaldes y concejales en 5.569 ciudades del país.