El alcalde de Río de Janeiro, el centrista Eduardo Paes, fue reelegido este domingo en primera vuelta, con un 60,26 % de los votos. Paes contó con apoyo del presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, y consumó la que puede ser la mayor derrota en estas elecciones municipales para el exmandatario Jair Bolsonaro, líder de la extrema derecha y cuyo candidato en Río quedó en segundo lugar.

Bolsonaro, quien tiene en Río de Janeiro su cuna y fortín en la política, se volcó en favor de Alexandre Ramagem, quien dirigió la Agencia Brasileña de Inteligencia en su Gobierno y hoy es investigado por una supuesta trama de espionaje ilegal.

Ramagem, quien también es diputado federal por el Partido Liberal (PL), obtuvo un 30,95 % de los votos, pese a que tuvo a su lado tanto a Bolsonaro como a dos de los hijos del exmandatario que han hecho carrera política en Río de Janeiro: el senador Flávio y el concejal Carlos.

Paes, del Partido Social Democrático (PSD), fue alcalde de Río de Janeiro en dos períodos consecutivos (2009-2017) y volvió en 2020 al cargo para el que ha sido reelegido este domingo. Su segundo mandato coincidió con los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, celebrados en 2016 y que aprovechó para revolucionar la estructura de una ciudad que es una de las principales postales del país.

Revitalizó la antigua zona portuaria, impulsó modernos sistemas de transporte y numerosas obras de infraestructura, así como promovió fuertes inversiones en las áreas de educación y salud, en las que durante el último año y medio ha tenido respaldo financiero del Gobierno de Lula.

"Agradezco mucho al presidente Lula, un supercompañero" 

Paes agradeció en forma especial el apoyo que recibió del presidente brasileño a lo largo de la campaña para las municipales.

"Agradezco mucho al presidente Lula, un supercompañero", que tiene "un cariño inmenso por Río de Janeiro" y "tiene la dimensión exacta de lo que esta ciudad representa para Brasil", declaró después de que fue confirmada su reelección.

El alcalde, que iniciará su nuevo mandato el 1 de enero de 2025, lamentó que, durante la campaña, "gente que hace de todo una supuesta ideología" haya agredido a algunos de sus seguidores, en una clara alusión a activistas de la ultraderecha bolsonarista. No fueron muchos episodios, pero sí hubo casos en que los ultras cargaron contra los seguidores de Paes, quien después de confirmarse su reelección hizo un llamamiento a la "unidad de los cariocas".