Melania Trump manifestó públicamente su apoyo al derecho al aborto, una postura que contrasta notablemente con la de su esposo, el expresidente Donald Trump. En una reciente entrevista, la exprimera dama dejó en claro que cree firmemente en la libertad individual y en la autonomía de las mujeres sobre su propio cuerpo. La declaración llega justo antes de las elecciones de noviembre, cuando el tema del aborto tomó un papel protagónico en el debate político.
Durante la entrevista con Fox News, la esposa del candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos subrayó: "¿Por qué alguien que no sea la propia mujer debería tener el poder de determinar lo que hace con su propio cuerpo?". Con estas palabras, Melania se alza como una voz de apoyo para las mujeres, reclamando su derecho a decidir sin intervención gubernamental.
En este sentido, la exprimera dama resaltó que en su libro, próximo a publicarse, detalló su visión sobre el aborto, afirmando que "es imperativo garantizar que las mujeres tengan autonomía para decidir sobre su maternidad".
La posición de Melania sorprendió a propios y extraños, especialmente en un momento en que los demócratas intentan posicionar a Donald Trump como un candidato que buscaría restringir el acceso al aborto.
Un posicionamiento personal y familiar
Ante la curiosa mirada de la periodista que la entrevistaba, Melania aclaró que su esposo está al tanto de sus creencias. "Donald sabía mi posición desde el día en que nos conocimos. Me deja ser quien soy y respetar nuestras diferencias", dijo. Y añadió: “No me preocupa. Todos deben decidir lo que quieren hacer”.
De igual forma, la postura de Donald Trump sobre el aborto fue cambiante. En un giro inesperado, el expresidente declaró recientemente que vetaría cualquier prohibición de aborto que llegara a su escritorio si fuera elegido nuevamente. A pesar de sus antecedentes de apoyo a restricciones al aborto, Trump parece estar adaptándose a un electorado que cada vez valora más los derechos reproductivos.
Ahora, Melania Trump toma posición el debate sobre el aborto, contra cualquier pronóstico, y a medida que se intensifican las campañas camino a la presidencia de Estados Unidos, donde su marido, busca nuevamente resultar vencedor.