Hoy se define si el peronismo bonaerense logra una lista de unidad o irá a internas. A pesar de que parece difícil que lleguen a un acuerdo, los dirigentes tienen todo el día de hoy para intentar fusionar las dos listas inscriptas, Unidad Peronista del actual presidente del partido Fernando Espinoza y Unidad y Renovación que encabeza el intendente de Merlo Gustavo Menéndez, en la búsqueda de no abrir heridas con un enfrentamiento en las urnas. El espacio político de Menéndez, que cuenta con el apoyo de la mayoría de los intendentes, dejó vacante la secretaria general en ofrecimiento a Espinoza.

La intensidad de la semana pasada en la que el justicialismo de la provincia de Buenos Aires debía definir si se presentaba con lista única para lograr la unidad interna o no se extendió hasta hoy a la noche. El ex intendente de Tres de Febrero, Hugo Curto, titular de la junta electoral del partido señaló ayer que “en el ochenta por ciento de los 135 distritos hay acuerdo y se evita la interna, este plazo que hemos resuelto tiene como objetivo que todos unan criterios y evitemos elecciones internas tanto a nivel provincial como a nivel municipal”. El dirigente peronista aclaró además que “el plazo para presentar listas ya quedó vencido, lo único que permitiremos ahora son ensambles de candidaturas”.

El entramado político se acerca a su final y los actores deben jugar sus cartas. Existe la posibilidad de que al mediodía se reúnan los negociadores de ambos sectores para acercar posiciones y cerrar una lista de unidad. Espinoza se mantuvo en el centro de la escena presentando lista propia a pesar de tener enfrente a casi todos los intendentes del conurbano reunidos en la lista que encabeza Menéndez y que ya tiene acuerdo para gobernar el partido. Los dos primeros años el intendente de Merlo será el presidente del PJ y el de Esteban Echeverría, Fernando Gray, el del Congreso y al promediar el mandato intercambiarán lugares.

Espinoza se hace fuerte con los intendentes del interior, pero sabe que no es suficiente como único sostén político interno, además de su distrito. Por ello en las huestes de Menéndez idearon el tándem que les permitió acordar entre los intendentes de la primera y la tercera sección electoral. Sin embargo, dejaron vacante en la lista el cargo de secretario general y también para el Congreso, dejando la puerta abierta a la última negociación. Las elecciones legislativas y la votación en la legislatura del Presupuesto que solicitó la gobernadora María Eugenia Vidal profundizaron las heridas.

Además de la posibilidad de acordar, dejaron trascender desde el PJ que podría llegar a plantearse impugnaciones. “Fernando quedó muy aislado. Yo creo que ni siquiera tiene candidatos para completar los cargos de la lista”, confió a PáginaI12 un intendente de la primera sección electoral que aseguró también que “sería un error garrafal de parte del presidente del partido que todo termine en una intervención por un error político de él”.

Las críticas que van de un lado al otro pasan por las últimas elecciones y las acciones de dirigentes en tiempos de macrismo. Los de Menéndez plantean que “se perdió en las últimas tres elecciones con la actual conducción y hace falta una renovación que nos de oxígeno”. Del lado de Espinoza desconfían de la oposición que ofrece el espacio renovador. Apuntan a los votos que se facilitaron al oficialismo para aprobar el presupuesto y del “peronismo light” del merlense por su acercamiento a Miguel Angel Pichetto o a Sergio Massa. En unas horas se define todo.