Víctor Hugo Morales cuestionó en su editorial de la 750 la política de ajuste, hambre y crueldad del Gobierno de Javier Milei y afirmó que figuras como las de Patricia Bullrich y Sandra Pettovello disfrutan del sufrimiento ajeno, mientras que los más vulnerables, representados por la UTEP, luchan contra el hambre y la indigencia.

El editorial de Victor Hugo Morales

La primera vez que dijeron que no entregarían los alimentos, aquello que nos pareció desmedidamente cruel hace ya 10 meses, estaban elongando. Un ejercicio precompetitivo, movimientos livianos como los de los deportistas para entrar en calor.

Lo que les esperaba era una larga cacería, una campaña con espada china en mano, cortando cabezas y cometiendo fechorías inimaginables.

Ahora, ya lanzados a la carrera del horror, repiten las escenas como entusiastas remeros del infierno, como implacables Carontes que conducen al caos.

Hoy, nuevamente tenemos la fila del hambre frente al Ministerio de Capital Humano. Y como el gato frente a la pajarera, Bullrich seguramente se pasa la lengua por los labios, esperando a ver qué sucede entre la muchedumbre hambrienta y el ejército despiadado que cobra más cuanto más pega.

La gente de UTEP, la Unión de Trabajadores de la Economía Popular, irá a recordarle a Pettovello el hambre que pesa cada noche en miles de niños, arrojados al infierno del resentimiento en tiempos de la peor indigencia que ha visto este país.

¿Qué va a salir de ahí? Le pregunto a Pettovello, a Milei. Una casta de crueldad, implacables funcionarios del sistema, nos preparan cada día para un mundo más violento.

Nunca olvidemos que Pettovello es solo un accidente, como los demás, son los extras de esta película de horror. Los protagonistas están fijando los precios, aumentando las tarifas y escribiendo los diarios.