Las elecciones para suceder a Maximiliano Abad en el Comité Provincia se convirtieron en un sinfín de acusaciones tras los resultados provisorios publicados por la Junta Electoral del partido. El oficialismo impugnó la votación en Quilmes, lo que dejó un vacío de información oficial. La oposición, por pedido de la Junta, llevó las urnas quilmeñas certificadas por escribano y, en paralelo, apeló ante la Justicia Electoral el accionar partidario y la difusión de datos “falaces”.

“El partido de la provincia denuncia a Maduro por manipulación y fraude y le reclama que presente las actas. Pero la Junta Electoral, controlada por el oficialismo, se niega a cargar las actas de este comicio”, remarcó el comunicado de Futuro Radical, la lista que llevó de candidato a Pablo Domenichini, quien fue claro en sus redes: "¡Muestren las actas ya!"

Entre las filas de la oposición, prima la conjetura de que la UCR Provincia no podrá acreditar mediante las actas los números que publicó en sus redes. “Vamos a ver si pueden presentar las actas de Tigre y de San Pedro”, apuntó un legislador que comulga en la vereda crítica hacia a la conducción abadista del radicalismo bonaerense. En el sector de Domenichini, y según los propios datos publicados por el rector de la Universidad Nacional Guillermo Brown, sostienen que vencieron al oficialismo por más de 500 votos.

Ante estas acusaciones, Miguel Fernández, ex intendente de Trenque Lauquen y virtual ganador de los comicios del último domingo, tildó de “una necedad que enturbia el proceso electoral” la actitud de la nómina que patrocinan Martín Lousteau, presidente del Comité Nacional, y el diputado nacional Facundo Manes.

“Dato mata relato”, sentenció Fernández en diálogo con Radio Rivadavia y aseguró que, según los datos recabados por su espacio, ganó la interna por más de 3.200 votos, contando las urnas de Quilmes. A su vez, reconoció que lista de Domenichini hizo una presentación ante la Justicia Electoral, consideró que habrá que dejar hacer su labor al Poder Judicial mientras se aguarda el escrutinio definitivo, pero aclaró que su victoria en 92 de los 135 municipios bonaerenses e, incluso, la obtención del 82 por ciento de los votos de los 27 distritos radicales, son una clara demostración de triunfo.

De todas maneras, lo único oficial hasta el momento son los datos provisorios que hizo públicos la Junta Electoral del partido y que la oposición cuestionó y apeló ante la Justicia. “Se dan por válidos resultados en los 135 municipios de la provincia de Buenos Aires sin haber efectuado un cotejo previo con actas ni certificados de los apoderados ni de las Juntas Electorales Distritales”, esgrime el texto de la presentación.

Condena que las impugnaciones a los distritos de Quilmes y Villarino de parte de la Junta fueron “de oficio”, pero que, ante igualdad de condiciones, los datos de Villarino sí fueron cargados en la nómina de resultados provisorios. Los de Quilmes son los únicos que tienen los casilleros vacíos.

Además, advierte que en los municipios de Azul, La Matanza, Florencio Varela y Lanús, “la Junta Electoral provincial ha cargado resultados que no representan la totalidad de los votos obtenidos por nuestra fuerza”. Es decir, por Futuro Radical. La apelación asegura que esta decisión es una “maniobra que tiende a generar un estado de confusión entre afiliadas y afiliados”.

Los dardos de la oposición no quedaron ahí. También cuestionaron el accionar del órgano electoral en los días previos a la elección. Asegura que dictaminaron “requisitos absurdos de fiscalización” y cuestionó la creación de un Google forms para la carga de resultados abriendo la puerta a “notificar datos apócrifos” de parte de cualquier persona.

Con todo este marco, en las últimas horas Domenichini invitó a través de su cuenta de X a Fernández a juntarse en la sede partidaria provincial para "responder a los medios y explicar el devenir de este proceso electoral". Cerró con el hastag "no al fraude".  

El huracán Quilmes

Tal como informó este medio, el principal punto de conflicto radica en Quilmes. Allí, al sur del conurbano bonaerense, y según las actas de escrutinio de la oposición, Domenichini obtuvo 6.989 votos, mientras que Fernández no superó los 230. Entonces, desde las filas abadista, cuestionaron los datos, aseguran que la diferencia y cantidades de votantes es mucho menor e, incluso, señalaron que “no es una elección real”.

De manera pública, Diego Garciarena, uno de los alfiles de Abad y presidente de la bancada radical que responde al senador nacional en la Legislatura bonaerense indicó que los números en las planillas quilmeñas son “inconsistentes” respecto al resto de la Provincia y que se “rompe la tendencia” en relación a los porcentajes de afiliados y afiliadas que se acercaron a votar.

Esto es real. Es decir, cuando el único distrito que supera los 6 mil votantes es La Plata y, por ejemplo, en el resto de la tercera sección sólo Lanús está por encima de los 3 mil, los más de 7 mil votantes en Quilmes llaman la atención. Pero, si se toma como parámetro la asistencia de las elecciones internas de 2021 en las que Abad se alzó con la victoria, el umbral de sorpresa se reduce considerablemente.

Según pudo constatar este diario, en aquellos comicios 5.963 empadronados se apuntaron en el Comité local para elegir al presidente del partido a nivel provincial. En esta ocasión, el número trepó levemente por encima de mil votantes más, algo que para la oposición es lógico porque, dicen, se juntaron “todos los que aquella vez estábamos separados”.

Ante este conflicto, la Junta Electoral solicitó a las autoridades partidarias del distrito que acerquen las urnas. Cumpliendo con el pedido, un grupo de correligionarios se dirigió a La Plata acompañados por, entre otros, el apoderado de la lista de Futuro Radical, Fernando Pérez Iglesias, ex diputado provincial que, precisamente, es oriundo de Quilmes.

En declaraciones a Infocielo, el dirigente remarcó que "la elección fue limpia y no hay ninguna denuncia de nada, las actas fuero firmadas por todos los fiscales y las autoridades de mesa las puso el oficialismo, más limpio imposible”.

Además, dentro de la oposición hay señalamientos hacia el vínculo entre Mario Carbonel, miembro de la Junta Electoral, y Andrés Villalva, uno de los apoderados de la lista Unidad Radical que encabezó Fernández. Desde las filas de Evolución le aseguraron a este medio que “son socios” en un estudio jurídico.

En este contexto, por la tarde de este lunes, las urnas llegaron al Comité Provincia “sin ningún incidente y sin patota”, afirmaron entre la oposición ante las versiones de algunos portales y dirigentes del abadismo, entre ellas la diputada nacional Karina Banfi que habló de "una patota de barras de Estudiantes de La Plata y Quilmes y miembros de la UOCRA platense, encabezada por Pablo Nicoletti y Fernando Pérez entraron violentamente en el Comité provincial UCR". 

Domenichini tampoco fue a La Plata, aclararon, ante los dichos de algunos medios. Ahora resta esperar que la Junta Electoral se expida y publique el escrutinio definitivo y, aparentemente, con la legitimidad de la totalidad de los votos quilmeños.

Entre los que sí estuvieron, y que lo hizo público en sus redes, fue el abogado Benjamín Lorenzetti. En su cuenta de X subió un video donde asegura que las urnas están en el Comité Provincia y le pide al oficialismo que "dejen de humillar a la UCR y asuman la derrota". 

Comunicado y apelación

Desde Futuro Radical emitieron un comunicado que, además de comparar al oficialismo radical de la provincia de Buenos Aires con las cuestionadas prácticas democráticas de Nicolás Maduro, presidente recientemente reelecto de Venezuela, señalaron una serie de irregularidades que motivaron una presentación judicial. Entre ellas, advirtieron que la Junta Electoral del partido “intentó habilitar la votación en casas particulares”, algo que se pudo evitar a partir de otra acción ante la Justicia Electoral.

Pero, en esta ocasión, la apelación de parte de la oposición es contra la Resolución N° 66/2024, la cual publicó los resultados provisorios, excluyendo, entre otras acusaciones hechas por Futuro Radical, a los votos de Quilmes.

En la presentación, el espacio de Domenichini pide que “se revoque” la resolución que muestra ganador a Fernández, “se ordene el cese y difusión y publicidad” de esta resolución y, también, se le ordene a la Junta comenzar junto a los apoderados el proceso de escrutinio para conocer el resultado de las elecciones del pasado 6 de octubre.

Respecto a la resolución en cuestión, el texto llevado a la Justicia reportó que la oposición fue notificada de su existencia a las 3 de la mañana del lunes 7 de octubre “impidiendo cualquier derecho a cotejar las actas de escrutinio”.

A su vez, hace hincapié en otros hechos que se dieron previamente a los comicios. En este sentido, explicaron que, más allá de contar con el aval de la manda judicial firmada por la Comisión Nacional Electoral que les permitía contar con fiscales de otros distritos en la provincia de Buenos Aires, algunas Juntas Electorales, como las de San Isidro, exigían requisitos como la certificación de escribano público que constate la afiliación.

“Durante el día de la votación en distintos distritos de la primera, cuarta, quinta y sexta sección electoral, las autoridades locales impidieron el ejercicio normal de fiscalización”, alude la apelación. El motivo: “No contar con el requisito de la certificación de escribano”. En la oposición señalan que contaban con la certificación emitida por la presidencia del Comité Ciudad de Buenos Aires de la UCR, lo que alcanza para dar cuenta de la veracidad de la afiliación.