Según datos oficiales, entre enero y agosto de este año hubo un descenso del 76,4% de las denuncias por robos tanto de cable de alumbrado público como de metales ferrosos y no ferrosos en Rosario. Durante estos meses se realizaron 49 inspecciones en la provincia. En todos los casos, el resultado de cada operativo derivó en la clausura de cada desarmadero y chatarrería inspeccionada. Se secuestraron más de "$35 millones y USD 10 mil, 12 detenidos y el secuestro de 10 armas de fuego", según detallaron y agregaron que "cuando hay control de los comercios que se dedican a lo ilegal, surgen delitos conexos que se vinculan tales como el narcomenudeo porque las personas de calle que cortan los cables y luego los venden, cobraban con droga del búnker del mismo titular de este tipo de comercio".