El juez federal Sebastián Casanello procesó con prisión preventiva por presunta "estafa informática, falsificación y uso de una marca registrada y adquisición y utilización de teléfonos celulares de procedencia ilegítima" al acusado de crear una plataforma web que daba herramientas de phishing para desbloquear iPhones robados o perdidos y permitir así su venta.

La decisión recayó sobre cinco acusados, uno de ellos identificado como Iván David Cudde, de 33 años y según la acusación creador de la plataforma desde donde se enseñaba a desbloquear los iPhones, informaron fuentes judiciales.

Cudde fue detenido en su domicilio de la ciudad de Santa Fe y quedó procesado como supuesto "partícipe necesario" de los delitos en tanto otros tres acusados quedaron imputados como "autores" por ser propietarios de tiendas de reparación y venta de celulares y quienes "desbloqueaban" los robados o perdidos para venderlos, usando las instrucciones de la plataforma.

Un quinto procesado detenido en Córdoba quedó imputado como "partícipe necesario" de los delitos y al igual que los demás fue embargado por 500 millones de pesos y además se dispuso la inhibición general de bienes.

“La investigación permitió reconstruir un circuito de actividades ilícitas desplegadas por un grupo criminal dedicado a la manipulación de sistemas informáticos que tenía por objeto defraudar a usuarios de teléfonos celulares marca Apple, que habían sido previamente víctimas de su robo u hurto, y, de este modo, desbloquearlos. Todo ello tendría como fin último obtener un rédito económico a través de su venta en el mercado de las telecomunicaciones --los celulares podrían así comercializarse como libres--”, explicó Casanello en la resolución.

Cudde, "como creador e ideólogo de esta empresa criminal habría facilitado a un número aún desconocido de personas la posibilidad de consumar delitos informáticos en carácter de ‘desbloqueadores’”.

“Lograron articular una industria novedosa y sofisticada en el rubro de las telecomunicaciones con la finalidad de beneficiarse económicamente a partir de la creación y utilización de la plataforma digital denominada ‘iServer’”, advirtió el juez.

La plataforma "operó desde el año 2016 hasta la actualidad, contando con un promedio de 2.000 usuarios registrados y 483.000 víctimas, entre las que se identificaron argentinas y de países como México, Chile, Colombia, Ecuador, Perú, España, Estados Unidos y Francia a quienes se les desbloquearon sus dispositivos de manera ilegítima”, señala la resolución.

La investigación está a cargo de los fiscales Paloma Ochoa y Horacio Azzolin y comenzó en junio último luego de una denuncia originada en un alerta llegado a Gendarmería Nacional desde un oficial de enlace de la Policía Nacional de España ante Europol que informó que la maniobra había alcanzado a usuarios europeos y había sido rastreada hasta la plataforma iServer, desarrollada por el argentino ahora detenido.

Los "desbloqueadores" pagaban 120 dólares por mes para tener acceso a las instrucciones y métodos de "phishing" que daban acceso a los dispositivos robados. Por ejemplo, se creaban mensajes vía SMS que simulaban provenir del fabricante del celular en los que se informaba al receptor que su teléfono extraviado o robado se había geolocalizado.

Ese mensaje, según se explicó, incluía “un enlace --link-- que direccionaba al usuario a un sitio web que también aparentaba ser de la empresa --por ejemplo iCloud de Apple en el caso de los iPhone-- donde, con la esperanza de recuperar el dispositivo, la víctima ingresaba sus claves y así las obtenían los delincuentes para desbloquear los equipos y reinsertarlos en el mercado de reventa”.