Los radicales que votaron contra los jubilados lo volvieron a hacer, ahora contra la educación universitaria pública y gratuita; una bandera que parecía ser histórica para la UCR. Los votos de Mariano Campero (Tucumán), Luis Picat (Córdoba), Martín Arjol (Misiones) y Federico Tournier (Corrientes) fueron centrales para reunir los 84 necesarios para que la oposición no alcance los dos tercios y se mantuviera el veto del presidente Javier Milei contra la Ley de Financiamiento Universitario. Por su parte, Pablo Cervi decidió abstenerse, favoreciendo también la estrategia del oficialismo y el PRO.
En caso de que los diputados radicales hubiesen votado a favor de la Ley de Financiamiento Universitario --que proponía una actualización bimestral de las partidas presupuestarias por inflación y hubiese implicado solo el 0,14 puntos del PBI--, la votación se hubiera dado vuelta y los dos tercios se habrían alcanzado. En los casos de Arjol, Cervi y Tournier, solo tenían que votar tal como lo habían hecho a mediados de agosto, cuando la Cámara de Diputados aprobó la media sanción de la norma.
En los casos de Campero y Picat no se puede hacer esa comparación, porque en la votación de agosto decidieron ausentarse. Hoy los ausentes fueron 8 y también jugaron un rol central; pero estuvo repartido entre varios partidos. A diferencia de cuando se aprobó la Ley de Financiamiento, este miércoles Campero y Picat se hicieron presentes para ir en contra del masiv reclamo de estudiantes, docentes y de la sociedad civil que reclamó no ajustar con la educación universitaria.
Los diputados ya habían tomado esta actitud semanas atrás cuando convirtieron sus votos a favor de una actualización a las jubilaciones -apenas un 8 por ciento-- para darse vuelta y respaldar el veto presidencial, en nombre del déficit cero o como sinceró en la tarde del miércoles el diputado del PRO y ex ministro de Educación Alejandro Finocchiaro para mandar un mensaje a "a los mercados, a los inversores internacionales y las consultoras de riesgo".
Aquella vez, cuando se pusieron en contra de los jubilados y lo anticiparon con una foto con sonrisas junto a Milei en la Casa Rosada, los diputados radicales fueron llamados "héroes" y agasajados con un asado en la Quinta de Olivos. Un asado que costó más por plato que el aumento que recibiría cada jubilado.
Este miércolesvolvieron a elegir acompañar a La Libertad Avanza, a pesar de que la Convención Nacional de la UCR decidió por amplia mayoría (todos menos el sector de Alfredo Cornejo) suspenderlos preventivamente, mientras el Tribunal de Ética analiza su desempeño en contra de la decisión del bloque y la historia del partido. Campero, Arjol, Picat y Cervi fueron alcanzados por esa decisión del partido, mientras que Tournier no porque es parte del bloque, pero no está afiliado oficialmente al pisoteado partido.