En una sesión llena de cruces, el Gobierno de Javier Milei logró que la Cámara de Diputados sostenga el veto del Presidente a la Ley de Financiamiento Universitario. La votación terminó con 160 a favor y 84 negativos. Además, hubo 5 abstenciones. Entre los que sumaron para que la ley fuera vetada, se encontraron los votos de tres diputados que hasta hace unos meses pertenecían a Unión por la Patria. Se trata de tres legisladores tucumanos: Agustín Fernández, Gladys Medina y Elia Fernández de Mansilla.

Estos legisladores, que alguna vez defendieron la educación pública y se alinearon con los principios del peronismo, optaron por romper con sus raíces y respaldar el desfinanciamiento de las universidades tras el pedido del gobernador Osvaldo Jaldo.

El apoyo de estos tres diputados fue crucial para que el veto presidencial se llevara a cabo, contribuyendo a un total de 160 votos que legitimaron esta decisión. Hasta hace poco, Fernández, Medina y Fernández de Mansilla habían hecho campaña bajo el sello de Unión por la Patria, presentándose como defensores de la educación y la igualdad social. Sin embargo, su reciente cambio de postura sorprendió a muchos y fue calificado como una traición a los principios que los llevaron a ocupar sus cargos.

Aquí están, estos son...

Agustín Fernández fue intendente en Aguilares y actualmente es el líder de "Independencia", el nuevo bloque que formaron los tres legisladores tucumanos tras romper con el peronismo. Esta separación, anunciada en enero de 2024, fue presentada por Jaldo como una necesidad para defender los intereses de Tucumán. "Cuando la Patria está en peligro, hay que sacarse las diferencias partidarias", argumentó, desdibujando el significado de la lealtad política. 

Fernández, desde este sorpresivo giro político, tiene una seguidilla de votos positivos a las propuestas del gobierno del ultraderechista: desde la Ley Ómnibus hasta el veto al aumento a los jubilados. Todo esto, sin ponerse colorado.

Gladys Medina es la otra diputada que integra el trío independiente. Ella fue una activa defensora de la educación. Autodefinida en su página web como una persona "comprometida con la educación como herramienta de transformación social", Gladys se dice dedicada a la docencia. La actual diputada jaldista fue profesora y preceptora en diversas instituciones educativas, y luego, tras un destacado ascenso social, logró fundar varias instituciones educativas privadas. 

Al igual que su compañero, la legisladora "con espíritu de servicio público", también votó a favor de los proyectos de Milei, lo que contradice con su legado vocacional, que promovía la enseñanza pública como un derecho esencial.

Elia Fernández de Mansilla, es otra de las diputadas que se sumó a esta controversial decisión, también está ligada a la defensa de la educación pública. Su carrera política, iniciada como intendenta, parece tomar un giro inesperado al optar por apoyar un gobierno que manifesta públicamente sus intenciones de desmantelar el sistema educativo.

Las protestas en Tucumán

Este cambio en la postura de estos diputados no solo desencadenó críticas desde la oposición, sino que también generó descontento entre sus electores, quienes se sienten traicionados por quienes eligieron como sus representantes. Muchos sostienen que este nuevo alineamiento es un claro indicio de la desintegración del peronismo en Tucumán y una señal preocupante para el futuro de la educación pública en Argentina.

Las decisiones del bloque Independencia, liderado por estos tres diputados, provocaron protestas entre estudiantes y defensores de la educación, que exigen un compromiso auténtico con el financiamiento de las universidades. En un momento crítico para el sistema educativo, el apoyo a políticas que debilitan la educación pública plantea interrogantes sobre la lealtad y el compromiso de estos legisladores con los intereses de aquellos que los votaron.

La traición a los principios que durante años sostuvieron el peronismo y su compromiso con la educación pública es un tema que seguirá resonando en Tucumán, mientras la comunidad espera respuestas de sus representantes.

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