Después del error con el que Javier Milei buscó cuestionar en sus redes sociales el funcionamiento de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) —y, por extensión, el de todas las universidades públicas argentinas—, el rector de la casa de estudios santafesina salió al cruce de la agresión del mandatario: "Espero más del presidente de mi país y la sociedad argentina se merece mucho más", sostuvo Franco Bartolacci, entrevistado en la 750.
En esa línea, agregó que lo que Milei busca es generar "una especie de manto de sospecha sobre lo que sucede en la universidad y en la ciencia para que el desprestigio sea el fundamento del desfinanciamiento". "No tengan ninguna duda que todas las afirmaciones van en esa dirección", destacó.
Además, el rector de la UNR consideró innecesario contestar en redes sociales al tuit del presidente. "Te diría que los que tenemos una responsabilidad institucional, sobre todo en instituciones educativas, tenemos que hacer un esfuerzo para que se levante un poco la vara, porque nada bueno va a surgir de esa dinámica", reflexionó Bartolacci, quien remarcó que no quería contribuir a "seguir empobreciendo el debate público".
Sin embargo, sí dedicó un tiempo para clarificar en números lo expresado por Milei. Por un lado, explicó que la casa de estudios rosarina tiene 90.056 alumnos, 6.835 estudiantes de posgrado, 7 escuelas medias preuniversitarias con casi 4 mil estudiantes, 11 mil estudiantes activos en escuelas de oficios, 4300 estudiantes en el programa de adultos mayores y más de 500 en una secundaria virtual para mayores de 18 años que no la pudieron terminar.
Además, la universidad cuenta con el área de producción de conocimiento, que institucionalmente está compuesta por 14 institutos de doble pertenencia con el Conicet, laboratorios, hospitales escuela de odontología y ciencias veterinarias, tareas asistenciales en hospitales destacados de Rosario y la región como el Eva Perón y el Centenario. Sumado a esto, hay 716 equipos de investigación, 7 comedores universitarios, 2 residencias universitarias, más de 40 edificios distribuidos en 6 ciudades y más de 800 hectáreas con campos experimentales. "Y te podría seguir mencionando un montón de otras cosas", remató Bartolacci en Escuchá Página|12.
Respecto de los cargos en la universidad, el rector de la UNR desmintió categóricamente al presidente y aseguró que Milei "distorsionó la información" porque contó la cantidad de empleados como si fueran cargos plenos, cuando los cargos son horas. "Hay una intencionalidad de desvirtuar para contribuir al desprestigio. Hay que salir a aclarar aunque sea muy cansador, realmente muy agotador", subrayó.
Por último, Bartolacci habló de la derrota legislativa de este miércoles y se manifestó esperanzado por la discusión que viene, el Presupuesto 2025: "Es como la vida misma, a veces aún perdiendo se gana y ese fue el caso de ayer (...) Y no tengan duda de que los 166 diputados manifestándose activamente a favor de la universidad pública sientan una base para la discusión del Presupuesto 2025, muy distinta a la que teníamos la semana pasada", concluyó.
El burdo error de Milei
En su afán por cuestionar de cualquier manera al funcionamiento de las universidades públicas y postear en redes sociales todo aquello que pueda defenestrarlas, el presidente Javier Milei publicó en su cuenta de X un grosero error de cálculo matemático por el cual fue calificado de “burro”, entre tantos adjetivos.
Lo que hizo el Presidente fue hacerse eco de un dato lanzado por el rector de la Universidad Nacional de Rosario, Franco Bertolacci, que indicó que en esa casa de estudios hay 85 mil alumnos de grado y 10.500 empleados.
Haciéndose eco de otra publicación que sostiene que la administración de las universidades es un “curro total en todos lados”, el Presidente posteó: “¿8 empleados por cada alumno? Se los dejo para pensar”.
Sin embargo, el cálculo matemático de Milei fue incorrecto porque la división que planteó debió ser al revés. En lugar de 8 empleados por cada alumno el resultado correcto es de un empleado por cada 8 alumnos.
El mal planteo, la mala ecuación, la lógica errónea y el resultado disparatado con el que el Presidente quiso sostener su crítica al funcionamiento de las universidades disparó una incontable cantidad de llamados de atención, burlas, chistes y reproches por parte de miles de usuarios.