El Gobierno Nacional celebró, en las últimas horas, un IPC de 3,5 por ciento, una desaceleración contra el mes previo y el número de inflación más bajo desde noviembre del 2021. Esa modificación se produjo, sobre todo, por una marcha más lenta del precio de los alimentos y bebidas, que crecieron por debajo de la media inflacionaria y ponderan fuerte sobre el índice de precios al consumidor. Con esos números, el ministro de Economía, Luis Caputo, salió a vender que la dinámica moderada del rubro cambió gracias a la baja de 10 puntos en el Impuestos País, un tributo que redujo su alícuota pero aún se aplica sobre todas las importaciones