La tensión entre una facción de las FARC y el Gobierno de Colombia escaló a una mayor escala luego que el Estado Mayor Central (EMC) realizara un ataque con drones en el departamento del Cauca y dejara más de 17 víctimas, a lo que el presidente Gustavo Petro responderá con un bombardeo al grupo disidente, lo que reprsenta una respuesta "proporcional" según el mandatario.

A través de su cuenta oficial de X, Petro anunció la decisión, inédita en sus dos años de gestión: "El EMC al bombardear población civil nos obliga, por el principio de proporcionalidad, a bombardear sus fuerzas". 

En este sentido, envió un "mensaje" contundente a las fuerzas disidentes: "Venzan la codicia y hagan la paz en favor del pueblo colombiano”.

El mandatario explicó que esta decisión responde a "la necesidad de proteger a la población civil y garantizar la seguridad nacional, afirmando que el Estado no puede permanecer pasivo ante violaciones al derecho internacional humanitario".

El conflicto comenzó este sábado, cuando el Gobierno colombiano envió más de 1400 militares en la llamada "Operación Perseo", que busca retomar el control de El Plateado, una zona clave del EMC, liderado por Iván Mordisco, en el municipio de Argelia. 

El ejército tenía como misión garantizar la seguridad de los ocho mil habitantes de la zona. Según el Ministerio de Defensa, se han detenido a dos presuntos disidentes y se incautaron armas y explosivos.

El Plateado, bastión del EMC, es una zona clave ya que es una de las rutas de tráfico de drogas que salen por el Pacífico y es escenario de enfrentamientos constantes entre el Ejército y los grupos armados ilegales.

Ante la presencia del ejército colombiano, el grupo disidente lanzó drones cargados con explosivos, dejando a 17 personas heridas, entre civiles y militares. Según inteligencia militar, lo que se pretendía inicialmente era que la población presionara a los miembros del Ejército a que se desplazaran hacia el parque principal para cometer el atentado; sin embargo, en el accionar criminal de las disidencias resultaron afectados civiles.

Desde el comienzo de su gestión en 2022, Gustavo Petro tuvo como eje principal cambiar la política militar en Colombia, enfocándose en reducir las bajas civiles, especialmente entre menores de edad que han sido reclutados por estos grupos armados.

La política de no bombardeos y de negociaciones de paz que lleva dos años en Colombia ha cambiado a partir de este ataque disidente.