La Comisión Fiscalizadora en Newell’s hizo oficial la preocupación por la deuda y exhortó a la dirigencia que preside Ignacio Astore a que inicie un proceso económico de reducción del pasivo para evitar un escenario de crisis. La directiva leprosa ante los repetidos fracasos deportivos tomó como hábito contraer más dinero prestado, temporada a temporada, como receta para encontrar el éxito del primer equipo. Dilapidó los fondos, no aumentó recursos si siquiera por venta de jugadores, la masa salarial del primer equipo no paró de crecer y se llegó a una situación límite. “Existe preocupación sobre la capacidad de la institución para continuar en funcionamiento sin caer en el incumplimiento de sus obligaciones”, alertaron los socios.

La Comisión Fiscalizadora no omitió su labor de diagnosticar y analizar los aspectos económicos y contables de la entidad y le acercó a la dirigencia un resumen inquietante sobre el presente de la administración rojinegra tras darse a conocer el nuevo Balance y Memoria. En primer lugar, la Comisión Fiscalizadora aclaró que “el auditor independiente no encontró un detalle sobre plazos estimados de créditos y pasivos. Esta información en un Balance donde se advierte un relevante crecimiento del pasivo, resulta absolutamente necesaria a los fines de no solo conocer la naturaleza sino sus detalles puntuales”.

Al cotejar números en relación al Balance del año pasado los resultados son concluyentes: el club tiene un aumento de la deuda vertiginosa e insostenible en los próximos meses. A saber: la deuda en moneda extranjera aumentó en 4,2 millones de dólares y la deuda total medida en dólares aumentó en 5,1 millón de dólares. “La tendencia al endeudamiento no solo no ha sido revertida a lo largo de estos año sino que ha sido acelerada, al punto que en los últimos tres períodos la misma ha aumentado a razón de un 30 por ciento anual y de más de un 40 por ciento en dólares”, informó la Comisión Fiscalizadora. “El endeudamiento citado ha superado en exceso el 20 por ciento del monto de Capital Social y la misma debió ser aprobada por Asamblea”, advirtió.

El hurgar en los números el análisis toma profundidad: El aumento de las deudas financieras fue de un 122 por ciento. La deuda con acreedores financieros es de 5 mil millones de pesos, habiendo aumentado en este ejercicio en 2,8 mil millones. El aumento de la emisión de cheques diferidos pendientes de cancelación es de 58 por ciento y las deudas del fútbol profesional subieron un 20 por ciento. Una situación similar con las deudas fiscales. En conclusión, al finalizar la Comisión Fiscalizadora requirió: "Encomendamos a la Comisión Dirección a una gestión responsable de la institución, con especial énfasis en reducir el pasivo que hoy se expresa".