Bajo el título “Cuidar y defender el derecho de los más vulnerables” y con la firma de su presidente, el obispo Luis Scozzina, la Comisión Episcopal para la Pastoral Aborigen dependiente de la Conferencia Episcopal Argentina, expresó en un comunicado su “preocupación” por “el avance de resoluciones y políticas de Estado que desconocen y vulneran derechos de los Pueblos Indígenas adquiridos a partir de Convenios institucionales y la misma Constitución Nacional” y se pide a los gobiernos “abandonar actitudes de violencia y represión frente a las comunidades indígenas”.
En el mensaje los obispos hacen suya la advertencia del Equipo Nacional de Pastoral Aborigen (ENDEPA) que denunció “múltiples atropellos sufridos por las comunidades” que, a sus vez, se ven “agudizados en este tiempo donde se exacerba el individualismo y la sobre explotación de nuestros bienes naturales y culturales y ante el creciente discurso estigmatizante contra los pueblos indígenas y de quienes acompañamos sus caminos de lucha”.
En el mismo texto se hace mención a una intervención pública del papa Francisco en la que pidió “en nombre de Dios a las grandes corporaciones extractivas —mineras, petroleras—, forestales, inmobiliarias, agronegocios, que dejen de destruir los bosques, humedales y montañas, dejen de contaminar los ríos y los mares, dejen de intoxicar los pueblos y los alimentos”.
ENDEPA había expresado también su preocupación porque “desde el poder político y económico se pretende nuevamente negar su preexistencia y pertenencia (de las comunidades) al Estado Argentino, con dolor volvemos a escuchar discursos y afirmaciones referentes a los pueblos indígenas como ‘los otros’, ‘los extranjeros’ retrotrayéndonos a un pasado violento y excluyente”.
En el mensaje de la Comisión Episcopal de Pastoral Aborigen y “frente a la escalada de conflictos, a partir del desconocimiento de la propiedad comunitaria indígena por parte de aquellos que usurpan sus territorios como así también la violencia ejercida contra las comunidades y contra aquellos que las acompañan, en su mayoría agentes de pastoral de ENDEPA” se reitera el llamado “en especial a los gobiernos, a abandonar actitudes de violencia y represión frente a las comunidades indígenas, e involucrarse en la superación positiva de los conflictos en sus territorios, en un marco de respeto por la verdad y las normas jurídicas vigentes, incluyendo a los indígenas como parte esencial de la solución mediante medidas no violentas que propicien el diálogo, la amistad social y la paz”.
El mensaje firmado por el obispo Scozzina, finaliza con una oración a Jesucristo a quien se le pide “danos la valentía de la libertad de los hijos de Dios para amar a todos sin excluir a nadie, privilegiando a los pobres, aborreciendo el odio y construyendo la paz”.