“La logística está frenando el desembarco de prefectos y demás fuerzas” a la frontera internacional en el departamento Orán, reveló ayer el interventor de Aguas Blancas, Adrián Zigarán. 

Zigarán hizo esa afirmación al ser consultado sobre el avance de las acciones que deben llevarse a cabo para concretar el plan de seguridad en la frontera norte anunciado por la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich.

“Salta potencia la aplicación del Plan Güemes con el compromiso de Nación en la custodia de la frontera norte”, posteó por su parte el gobernador Gustavo Sáenz en la red social X. 

Sáenz sostuvo que se avanza en las “articulaciones pertinentes para la instalación de la primera base de Prefectura Naval Argentina en Salta, además de la llegada de refuerzos de Gendarmería Nacional al norte provincial, en el marco del Plan de acción y colaboración entre Provincia y Nación”. Se prevé que la sede de Prefectura en Salta estará en Aguas Blancas, pueblo argentino solo separado de la ciudad boliviana de Bermejo por el río homónimo. Un puente y un puerto de chalanas unen a ambos países en este punto. 

Las autoridades municipales de Aguas Blancas enfrentan por estos días las dificultades de la movilización y localización de 600 agentes que llegarían a la zona. “No es fácil movilizar a tantas personas”, afirmó Zigarán ante las consultas de Radio Nacional. Afirmó que por eso están colaborando para encontrar los espacios físicos necesarios para que los agentes puedan contar con la comodidad que les corresponde.

Contó que por su parte, busca contar con un sistema de campamentos mineros. El intendente de Orán, Baltasar Lara Gros, también colabora en esta gestión. “Vamos a poner (la información) a disposición del gobernador para que indique la estrategia más conveniente”, afirmó Zigarán.

Al hablar de las repercusiones en la población de la llegada de Prefectura y más agentes de Gendarmería y la Policía Federal, el interventor sostuvo que es positivo que llegue este control a la ribera del río en la cual no podía intervenir ninguna fuerza local, por lo que una zona "larga, ancha y selvática”, como es esta ribera, se convertía en tierra de nadie, dijo. “Los malvivientes aprovechan a visitantes que llegan tarde (a la frontera) y les roban directamente”, afirmó. La expectativa es que esta falencia de controles pueda ser cubierta con la llegada de la Prefectura.

Sin embargo, Zigarán consideró que quienes “viven del bagayeo” (trabajadores informales que pasan productos de una parte de la frontera a la otra) “tienen miedo de que haya una restricción total”. En este punto, afirmó que la posición es “combate al narcotráfico y control al bagayeo”. Y añadió que ya en 2015, durante la visita a la frontera de Patricia Bullrich en su calidad de ministra macrista, “entendió que es un tema que no se puede resolver de la noche a la mañana”.

Asimismo, el interventor volvió a ponderar la necesidad de la Prefectura en la frontera, más aún cuando desde hace unos cinco años comenzaron a registrarse asesinatos a manos de sicarios en esta zona con una asiduidad desconocida hasta entonces.

“Parecía una peatonal”

El viernes último por la noche, el juez de Garantías de Orán, Raúl López, suspendió la prisión domiciliaria que él mismo le había otorgado al ex intendente de Aguas Blancas, Carlos Alfredo "Conejo" Martínez, acusado de interferir en una causa judicial en la que se investigaba el asesinato por sicarios de su hermano, César "Oreja" Martínez. El ex intendente fue entonces trasladado a las dependencias de Infantería de Orán.

Entre los fundamentos, el juez afirmó que se habían detectado irregularidades en las condiciones en que Martínerz cumplía la domiciliaria, entre ellas la cantidad de visitas que recibía. 

Zigarán ratificó esa información: “Eso parecía una peatonal”, sostuvo Zigarán. “Más que verlo, conocemos, porque (el domicilio donde estaba Martínez) está a diez metros” del edificio municipal de Aguas Blancas, detalló.

Afirmó que también empezó a entorpecer su manejo del municipio dado que surgieron rumores de que la intervención no duraría más de 60 días. “Empleados nuestros después de hora se cruzaban al frente”, indicó. Esto sucedió en el marco de una interna que quedó planteada tras la breve intendencia del presidente del Concejo Deliberante de Aguas Blancas, Fabián Gutiérrez, que asumió en la Municipalidad cuando Martínez tuvo que tomar licencia ante la causa que se le seguía. “En 48 horas (Gutiérrez) cambió el gabinete, entonces la gente de Martínez se siente traicionada”, detalló Zigarán. 

Corte en el puente internacional

Al ya complicado panorama de la frontera, ayer se sumó un corte sobre el puente internacional motivado por la falta de energía que persiste en Bermejo desde hace al menos cuatro días.

El colapso de la provisión de energía eléctrica se generó tras la falla en un transformador y según las autoridades del Servicio Eléctrico de Tarija (SETAR) -departamento boliviano en el que se incluye Bermejo-, desde el sábado el servicio está sin ser reestablecido porque tampoco hay gas ni presión suficiente para poner a funcionar el generador.

Hasta ayer, la única respuesta era tener una alternativa con el gas, o de lo contrario esperar hasta el jueves, cuando se prevé la llegada del nuevo transformador.

Por el momento, los vehículos no podían pasar por el puente internacional, aunque el paso de chalanas sí estaba habilitado.