El periodista y conductor de La Mañana, Víctor Hugo Morales, se hizo eco en su editorial de las palabras de Norman Briski durante la entrega de los Martín Fierro cuando dijo que “la ficción está en la Rosada”. Tras repasar el confuso episodio en el que el presidente salió a saludar quienes estaban en Plaza de Mayo y recibió insultos y abucheos por parte de cientos de estudiantes que reclamaban por mayor presupuesto, aseguró que “apropiarse de la ficción para destruirla, esa sí que es una película de clase B”.
El editorial de Víctor Hugo Morales
"La ficción está en la Rosada", dijo Norman Briski entre aplausos y miradas indignadas, según la pertenencia, o no, al sistema opresivo y criminal de Milei. Porque todo eso es. Hay que estar a favor de Milei, eh.
La ficción está en la Rosada... robada... convertida en una realidad que supera lo imaginable. Un libreto urdido por tramoyistas del sistema económico del país, torpe, sin gracia, pero que les permite apropiarse de todo, del cine, de la cultura, para amasijarla.
En plena invención, en el balcón de la fantasía, tan cercano a la distopía, el engaño funcionó un ratito. Milei saludaba a la nada de la plaza, tipo Macri bajando la escalinata del avión con la mano en alto. Fue cuando de pronto llegaron los estudiantes con su indignación y su coro, y ya era otra película.
La cámara que no mostraba la plaza tuvo que girar, la ficción de los títeres del balcón rotó hacia los que llegaban con su canto siempre esperanzado. Entonces los Muppets, Petete y Chirolita, huyeron despavoridos.
El significado de los estudiantes en la plaza, la espontaneidad de los jóvenes, cargó hacia el balcón con el enojo de los estafados, reclamando por el corralito a la cultura y la educación.
Lo que dijo Norman Briski, entre miradas de poco sutil alineamiento con Milei y su Armada Brancaleone, fue la síntesis de una estafa descomunal. Porque han robado a los jubilados, a los estudiantes, a los científicos, pero apropiarse de la ficción para destruirla, esa sí que es una película de clase B.