"Francos miente y además sabe que miente, lo cual es aún más grave", sentenció Gabriel Katopodis, ministro de Infraestructura y Servicios Públicos bonaerense, en diálogo con Buenos Aires/12 al retrucar las críticas que recibió por parte del jefe de Gabinete de Javier Milei, Guillermo Francos. El responsable de la coordinación ministerial libertaria había cuestionado la convocatoria a un apagón nacional para protestar contra los aumentos en los servicios, militada activamente por el bonaerense.
Francos quien empezó con el fuego cruzado en medio de un encuentro con empresarios en la ciudad de Mar del Plata. En sus declaraciones, Francos descalificó la propuesta de Katopodis diciendo: "Si llama a un apagón, tal vez sea porque no tiene dinero para pagar la luz, porque no le cierran las cuentas". Además, lo acusó de mala gestión durante su paso como ministro de Obras Públicas de la Nación, alegando que dejó un caos con más de 4 mil obras paralizadas. Caminando la provincia producto de la función que lleva adelante desde el gobierno de Axel Kicillof, Katopodis no tardó en responder.
El ministro provincial defendió su gestión durante la gestión del Frente de Todos señalando a este medio que cuando dejó el Ministerio de Obras Públicas, había 2.400 proyectos en ejecución, de los cuales, según él, el 80 por ciento están actualmente detenidos, producto de la decisión del Gobierno nacional de frenar la obra pública. "Este año solo se terminaron 122 obras en todo el país, mientras que el año pasado, en solo 11 meses, completamos cinco veces esa cantidad", afirmó .
Además, Katopodis destacó que en lo que va del año apenas se pusieron en marcha 45 nuevas obras en todo el país. Por cada una de esas obras, el Frente de Todos inauguró 25, asegura. "Es fácil verificarlo: basta con visitar el sitio de transparencia que nosotros creamos, donde figura información detallada de cada obra", aseguró. Frente a esta situación, el Gobierno de la provincia de Buenos Aires lleva adelante gestiones para transferir y hacerse cargo de obras estratégicas que estaban bajo la jurisdicción de Nación. En paralelo, varios municipios están siguiendo la misma línea en consonancia con la Provincia.
El ministro también dejó claro que las acusaciones de Francos no tienen relación con el apagón de 10 minutos que se llevará a cabo el 31 de octubre a las 21 horas. Según Katopodis, el objetivo de esta protesta es darle visibilidad a las dificultades económicas que enfrenta la mayoría de los argentinos debido a las exorbitantes tarifas de los servicios públicos. "Francos solo busca ensuciar porque sabe que lo que hicieron con las tarifas es tan malo para la gente como detener por completo la obra pública", sentenció.
El apagón nacional
Katopodis explicó que la convocatoria al apagón tiene como meta generar conciencia sobre los efectos de las políticas tarifarias del gobierno de Milei, que han afectado gravemente a la clase media desde 2023 y a pequeños comerciantes, con pérdida de empleos y una caída libre del poder adquisitivo de los bonaerenses. "Queremos que el Gobierno escuche a los usuarios, a las pymes, a los comerciantes, puede optar por no hacer caso a sus reclamos, pero tiene la obligación de escuchar, pero lo que está pasando es real, es grave y hasta trágico para muchos", afirmó el ministro.
El titular de la cartera de Infraestructura bonaerense también criticó la distribución desigual del impacto tarifario que no recae en “la casta” como argumentaba en su campaña presidencial Javier Milei, sino en la vida cotidiana de los bonaerenses.
"En el Área Metropolitana de Buenos Aires, las tarifas de electricidad para una familia de altos ingresos se multiplicaron por tres, mientras que para una familia de clase media casi por ocho", detalló. En su opinión, estas decisiones solo profundizaron la desigualdad social, y son el reflejo de un ajuste brutal que creó 5 millones de nuevos pobres en Argentina, al igual que de una recesión que no parece revertirse, de acuerdo a lo expresado por el Ministerio de Economía bonaerense.
Katopodis también recordó un reciente discurso de Milei en la Unión Industrial, donde el Presidente declaró: "Vinimos a achicar el Estado para agrandarles el bolsillo a ustedes". Para el ministro, esta frase resume la esencia de las políticas tarifarias del actual Gobierno nacional, que benefician a unos pocos, principalmente a los grandes empresarios, a costa del malestar de la mayoría.
Los argumentos del Gobierno y la postura de Katopodis
El Gobierno de Milei defendió los aumentos en las tarifas de los servicios públicos, justificando que reflejan los costos reales de producción y son necesarios para garantizar la estabilidad del suministro energético. Sin embargo, Katopodis cuestiona la veracidad de estos argumentos. "Para afirmar que las tarifas reflejan los costos reales, primero tendríamos que conocer esos costos, y la realidad es que son secretos", sostuvo.
El ministro también señaló que las empresas energéticas están obteniendo ganancias extraordinarias, lo que pone en duda la necesidad de estos aumentos desproporcionados que caen como un “baldazo de agua fría” en los bonaerenses y que no parecen tener un freno a corto plazo. "Si los aumentos de tarifas hubieran sido necesarios, no estaríamos al borde de nuevos apagones en el verano, y el secretario de Energía no habría sido removido de su cargo", agregó.
Para Katopodis, el verdadero problema radica en la política económica del Gobierno nacional, que está "dolarizando lo que la gente tiene que pagar y pesificando los salarios". Esto, según el ministro, afectó no solo a las familias, sino también a las pequeñas y medianas empresas, los clubes de barrio y otros sectores productivos, con un impacto particularmente severo en la clase media.
Katopodis confía en que el apagón va a ser positivo. “Creo que cualquier protesta pacífica, como lo es este apagón, tiene el potencial de frenar las políticas destructivas de este gobierno", dijo. No obstante, también dejó abierta la puerta a futuras acciones. "Seguramente tendremos que realizar más protestas y encontrar nuevas formas de hacer que se escuchen nuestros reclamos", anticipó.
El ministro concluyó reafirmando su compromiso de resistir las políticas del Gobierno de Milei. "No me voy a quedar de brazos cruzados mientras destruyen al país y a las familias argentinas. Seguiremos levantando la voz hasta que se reviertan estas decisiones injustas", finalizó.