Desde el lunes 28 de octubre hasta el sábado 2 de noviembre, en Mar del Plata, 26 mil personas participarán de las finales de los Juegos Bonaerenses 2024, el certamen que conforma la política pública deportiva más importante del país. "No se trata sólo de una competencia deportiva, sino también un espacio de encuentro y de construcción comunitaria, además de un orgullo”, graficó el ministro de Desarrollo de la Comunidad, Andrés Larroque, cuya cartera invirtió 12 mil millones de pesos para la realización de la competencia.
El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, viene sosteniendo que su única pelea es "contra las políticas del presidente Javier Milei", y que su gobierno busca ser "un escudo de protección para todos los bonaerenses". Estas dos definiciones son ejes que también se replican en el área de gobierno destinada al deporte, porque a diferencia del Gobierno nacional, que recortó todas las partidas en la materia a través del secretario Daniel Scioli, la Provincia redobló los esfuerzos y desembolsó los fondos necesarios para llevar adelante la competencia.
El subsecretario de Deportes bonaerense, Leandro Lurati, explicó los motivos: "Los Juegos Bonaerenses son una política integral en la que cada pibe y piba tiene la oportunidad de sostener, en una etapa de la vida tan importante como es la adolescencia, un proyecto compartido con otros vínculos sostenidos a lo largo de un año, cuidando su salud física, mental y comunitaria. Por eso, mostrando una gestión eficiente, nosotros sí apostamos al futuro del deporte".
Las finales de la edición 33 de los Juegos Bonaerenses contarán con más de 100 disciplinas deportivas y culturales. Y además de los jóvenes mencionados por Lurati, también participan de ellas personas con discapacidad, personas trasplantadas y adultos mayores. "Para tener una idea del tamaño de estos Juegos, en los Juegos Olímpicos de París 2024 compitieron 12 mil atletas en dos semanas, y nosotros recibiremos 26 mil en cinco días y medio”, comparó el subsecretario en diálogo con Instinto Amateur, un programa de Radio Provincia.
Desfinanciamiento
A diferencia de los 12 mil millones de pesos que desembolsaron las arcas provinciales para la realización de la competencia en todas sus etapas, el Gobierno nacional sólo destinó 3 mil millones de pesos para los Juegos Nacionales Evita, un desfinanciamiento superaltivo en relación al 2023, que generó reducción de actividades, quita de categoría, y falta de participantes. Ante esa situación, las autoridades bonaerenses anunciaron que, en Mar del Plata, también se llevará adelante de forma exclusiva la Copa Buenos Aires.
Tras celebrar la inversión cuatro veces mayor a la de los Juegos Nacionales Evita 2024, lo que consolidó a los Juegos Bonaerenses como la política deportiva más importante y con mayor despliegue del país, el ministro de Desarrollo de la Comunidad destacó: "A pesar de las dificultades económicas aseguramos los recursos necesarios para que los Juegos puedan desarrollarse en toda su magnitud y todos los jóvenes puedan viajar, competir y disfrutar, porque tenemos un compromiso con la inclusión y la igualdad de oportunidades, y eso quedó demostrado en el trabajo conjunto con cada uno de los municipios".
La cartera conducida por Larroque es la que encuadra el área de Deportes, y Lurati, el titular del organismo, destacó un punto central para entender por qué se pueden movilizar 26 mil personas a Mar del Plata en tiempos tan difíciles. "Hemos sobrecumplido los plazos de anticipo de pagos a los Municipios para afrontar los gastos operativos”, destacó el funcionario, en relación al decreto que contempló la transferencia de fondos no reintegrables por un monto de más de 1.975 millones de pesos.
Según supo Buenos Aires/12, la movilización de tantas personas a Mar del Plata había generado preocupación en algunos municipios, debido al elevado costo de traslado. De hecho, varios distritos habían expresado dudas sobre su participación, pero los municipios recibieron los anticipos económicos necesarios para solventar los gastos derivados de la competencia. Por citar algunos ejemplos, La Matanza recibió más de 61 millones de pesos, La Plata más de 57 millones pesos, Bahía Blanca más de 52 millones de pesos, y así sucesivamente, según la densidad de cada municipio.
Más de 400 mil personas se anotaron para la competencia que, también en esta edición, sumó una instancia interregional, que se sumó a las tradicionales etapas locales y regionales. Allí también dijo presente el financiamiento provincial, que subsidió la agenda de competencias de las distintas disciplinas. Según destacaron, esto tuvo un impacto superlativo para los actores y referentes del deporte provincial por varios motivos. Primero, porque al tratarse de la provincia más amplia del país, esto facilitó la participación de los jóvenes en encuentros generalmente costosos por las distancias que afrontan las delegaciones. Pero además, con la creación de la instancia interregional, los ocho distritos que oficiaron como sede exhibieron sus capacidades estructurales y deportivas, y sus actividades locales, muchas de ellas relacionadas al turismo.
“Existe un fenomenal contraste entre la idea de estatalidad que propone el Gobierno Nacional, y la que proponemos desde la Provincia de Buenos Aires, privilegiando la inclusión, el derecho al ocio y la recreación, así como el impacto económico local positivo que provoca la realización de las finales para la ciudad de Mar de Plata y su entramado hotelero y comercial", destacó Lurati, y sentenció: "El despliegue de un evento de estas características requiere mucho esfuerzo y no hubiera sido posible sin el compromiso de los 135 municipios, las instituciones educativas provinciales y, fundamentalmente, sin el entusiasmo inagotable de los cientos de miles de participantes”.