"Creemos que es urgente articular nuestra lucha con las luchas por los derechos humanos de todos los territorios: Abuelas y Madres de Plaza de Mayo, pueblos originarios, disidencias sexuales, universidades, el ecocidio y todas las luchas que dan batalla al extractivismo patriarcal y violento, sobre nuestros cuerpos y territorios." Las palabras determinaron su consigna urgente en la Asamblea Plenaria Federal de Grito Global, de cara al próximo 19 de noviembre, convocada esta semana por el Colectivo Yo Sí Te Creo (YSTC) - Contra el Abuso Sexual en las Infancias, y donde también quedaron definidas las acciones en Ciudad de Buenos Aires, con el acompañamiento a la ronda de Abuelas y Madres, y la lectura de un documento.

Camino hacia la organización de las acciones que se realizarán este 19N, Día Contra la Violencia Sexual a las Infancias, el encuentro puso foco en la avanzada antiderechos y el aumento de la violencia y la precarización en las vidas de quienes denuncian violencia sexual a las infancias y juventudes. “Madres, xadres y sobrevivientes creemos que la violencia sexual y la criminalización, persecución e invisibilización de quienes la denunciamos, está en aumento. En un momento en que la sociedad se empobrece y fragmenta, y la salud mental pende de un hilo, es urgente aprender a estar cada vez más juntxs”, coincidieron lxs referentxs de Ciudad de Buenos Aires, Provincia de Buenos Aires, Corrientes, Entre Ríos, Chaco, Salta, La Rioja, San Juan, Santa Fe, Córdoba, Mendoza, Patagonia y Tierra del Fuego, junto con organizaciones sociales y políticas de todo el país, como la Campaña Contra la Prescripción, Orilleres, No Matarás, Marabunta, el Colectivo Ni Una Menos, Arda, Ronat e Infancias Libres, entre otras.

“Lo más importante de la reunión fue escucharnos y pensar juntxs", celebraron Victoria Acevedo, sobreviviente de abuso e integrante del Colectivo Yo Sí Te Creo, y sus compañerxs, en un escrito coral para Las12. “Sostenemos la lucha como feministas en tiempos de desastre, es por eso que reivindicamos la política de la ternura, como modo de hacer red para sostenernos y fuerza para decir que otro mundo es posible. Gritamos juntas Yo Sí Te Creo.”

En esa cuerda, cada territorio decidirá de qué manera organizar la acción de Grito Global, según se acuerden sentadas en plazas y lugares públicos, intervenciones artísticas, visibilización de casos con afiches, pegatinas, carteles y proyecciones. Todas acciones contra la prescripción de las causas, el silencio que alimenta el encubrimiento social e intrafamiliar, contra las prácticas encubiertas del patriarcado y contra un sistema de adoctrinamiento de los cuerpos.

Tal como adelantaron, en la Ciudad de Buenos Aires acompañarán la ronda de los jueves de Abuelas y Madres de Plaza de Mayo, para luego dar lugar a la lectura de un documento en las voces de distintas referentas, con actividades cuidadas para infancias.

De esto sí se habla

“Somos un colectivo transfeminista contra la violencia sexual hacia niñeces y adolescencias. Lo componemos sobrevivientes y madres protectoras que decidimos transformar el dolor de nuestras historias y vivencias en lucha. Nos formarnos y especializamos sobre un tema del que no hablaba nadie y hoy somos un colectivo de alcance nacional. Nuestro camino comenzó por 2014, cuando éramos la Red Nacional de Visibilización del Abuso sexual a Niños, Niñas y Adolescentes, que en 2018 mutó cuando decidimos conformar Yo Sí Te Creo. El contexto político y social había cambiado gracias a las múltiples denuncias públicas que emergieron del silencio de años y décadas”, dice la introducción del texto elaborado por YSTC.

“En 2020 Yo Sí Te Creo fundó Grito Global contra el abuso sexual, un espacio virtual como herramienta para territorializar y poner en contacto a quienes necesitan información, organizarse y generar estrategias. El 19N es el Día Contra el Abuso Sexual en las Infancias a nivel global. En todo el territorio nacional se realizan acciones de visibilización, que se potencian a través de Grito Global, porque allí las ponemos en común y replicamos”, continúa.

“Creemos en la pluralidad de voces y miradas, en un mundo donde las niñeces son libres y no tienen que pasar por juicios explicando una y otra vez el daño que les han hecho, donde las personas adultas que acompañan no son señaladas ni torturadas por el sistema judicial”, subraya el escrito. “Un mundo donde el tiempo no es relevante sino el poder romper el silencio y compartir el dolor, para hacerlo más pequeño. Donde un abrazo desarma toda disociación, junta las partes y nos regala risas que bien merecidas las tenemos.”

“Nos identificamos simbólicamente mediante el pañuelo rojo, a partir del cuento Caperucita Roja, donde una niña es engañada por el Lobo Feroz. Durante siglos este cuento les dijo a las infancias que no confíen en desconocidos, pero nosotres sabemos muy bien que en más del 75% de los casos, la violencia sexual en las infancias es perpetrada por personas que pertenecen al mundo intrafamiliar o son muy cercanas a éste. Nosotres no nos comemos más el cuento del lobo. Violencia sexual en las niñeces nunca más. La marea roja crece y no se detiene. Sobre nuestres niñes y juventudes no pasarán. Sobre nuestros cuerpos no pasarán.”