Desde Neuquén
Carlos Berisso, tres veces vencedor en la cita máxima de la regularidad nacional en ruta, volvió a imponerse en una etapa del Gran Premio Argentino Histórico (GPH) que es organizado por el Automóvil Club Argentino (ACA). Condujo con excelente precisión su Volvo 122 del año 1963, acompañado por el experimentado Horacio Riccio.
La jornada comenzó temprano a orillas del lago Lácar en la espléndida ciudad turística de San Martín de los Andes. El característico canto de las bandurrias fue acallado por el rugir de los motores a la hora de la largada. Alejandro Apaolazza, Secretario de Turismo de la ciudad, saludó a los competidores junto al Vicepresidente del ACA, Jorge Revello, al frente de la organización como todos los años.
Durante la mañana, el recorrido elegido por Escudería Norte fue espectacular. La emblemática ruta nacional 40 los llevó hasta proximidades del majestuoso volcán Lanín que lucía cubierto de nieve. De ahí empalmaron con la ruta provincial 23 hacia el norte, que desafió a las reliquias rodantes con un trayecto muy sinuoso siempre costeando el caudaloso río Aluminé. Las subidas y bajadas se sucedieron a la vez que el asfalto dejó paso primero a la tierra con “serruchos”, y después a la piedra. La polvareda anunció a lo lejos la presencia de la carrera, recordando lo que se veía en los grandes premios de décadas atrás.
El trabadísimo ascenso a Rahue sobre tierra y por sus característicos caracoles, resultó lo destacado del día. Lo sucedieron el no menos vistoso paso por Espinazo del Zorro y por el Parque Nacional Laguna Blanca situado 1.230 metros sobre el nivel del mar, aunque ya por la ruta provincial 46. Al llegar a la estación YPF del ACA, el púbico pudo interactuar con los intrépidos volantes y sacarse fotos con ellos y sus joyas mecánicas. El regreso a Neuquén fue por la misma ruta 22 transitada el lunes con su habitual tránsito.
Las condiciones le cayeron de maravillas a la tripulación del Volvo 122, que marchaba expectante en segundo lugar. Con lo hecho, pasaron al frente del Gran Premio Histórico con una luz de 1s74/100 sobre los Zaccarías, padre e hijo con el Peugeot 404. Al tercer puesto cayeron Uberti-Nasazzi, punteros hasta San Martín de los Andes.
En la trigésimo segunda posición general se encontraban los mejores al momento en categoría velocímetro: los rosarinos Colombi-García con BMW 320. Seguidos de los Laiño (Renault 12) y por González-Durán (Ford Escort Sport). Mientras que en la categoría Turismo Carretera, Héctor Pardal y Agustín Vergagni dominaban a voluntad con un Torino Liebre de 1971, ocupando la vigesimoquinta posición absoluta.
Alejandro Apaolazza, Secretario de Turismo de la ciudad, saludó a los competidores junto al Vicepresidente 2º del ACA, Jorge Revello.
La penúltima etapa del GPH se llevó a cabo este jueves con un recorrido de 731 kilómetros, el tramo más extenso de la competencia, con salida desde Neuquen y arribo en el Parque de Mayo de la ciudad de Bahía Blanca.