Lo que era una amenaza terminó convirtiéndose en realidad. Ricardo Quintela decidió judicializar la interna peronista al presentar un recurso de apelación y solicitar que la Justicia Federal habilite su participación en la elección del PJ. Lo hizo luego de que el tribunal del propio partido rechace su candidatura porque su lista -"Federales, un grito de corazón"- no contaba con los avales necesarios.
En una nota dirigida a la Junta Electoral peronista, la lista de Quintela pidió la suspensión del proceso electoral fechado para el 17 de noviembre, hasta tanto no se haga lugar a su apelación por las irregularidades presentadas de "Federales". Entre ellas figura que los 70 mil avales presentados por la agrupación, solo 60 mil habían sido registrados en las planillas y 12 mil de ellos fueron considerados "inválidos". La lista debía presentar, en 24 horas, más de 14 mil avales nuevos para alcanzar el piso mínimo reglamentario del 2 por ciento del padrón pero no lo hizo.
Según contó el gobernador riojano, el dirigente del PJ porteño y uno de los apoderados de la lista de Cristina Fernández de Kirchner, Juan Manuel Olmos, lo llamó para que decida claudicar y dar de baja su lista. Ya lo había hecho días atrás, antes del cierre, cuando le ofreció a Quintela la vicepresidencia primera y un 25 por ciento de los consejeros. Tal como hizo ese día, el gobernador le volvió a decir que no.
"Queremos que se garantice el derecho de elegir de las y los afiliados del partido, como así también nuestro derecho de poder ser elegidos. Esperamos una pronta resolución, pensando en lo mejor para el partido Justicialista", expresó la lista tras da a conocer el recurso de apelación.
Una visita a Casa Rosada
Paralelamente mientras se cocinaba la presentación judicial, el apoderado de la lista de Quintela, Jorge Yoma, llegó hasta Balcarce 50. Allí lo esperaba Guillermo Francos. Pero lejos de una mera reunión, la presencia de Yoma en Gobierno fue leída en círculos políticos como una muestra de la sintonía del gobernador riojano con Javier Milei en el marco de la disputa por la conducción del justicialismo.
Milei no ocultó de qué lado de que lado está en la interna que enfrenta a Quintela con Cristina Kirchner. El Presidente confesó el “morbo” que le generaría "meterle el último clavo al cajón del kirchnerismo, con Cristina adentro".
Yoma fue a ver este lunes antes del mediodía al jefe de Gabinete, Guillermo Francos. "Es natural que ocurra", plantearon desde el entorno del funcionario sobre la visita, alegando temas propios de la puesta en pie de la elección interna del PJ.
El Partido Justicialista le pidió hace unas semanas a la Dirección Nacional Electoral (DINE) 6000 urnas para poder realizar la interna. La respuesta fue que sólo había disponibles 3200 urnas disponibles y que el resto de las existentes son para los comicios nacionales.
El Gobierno hasta acá evitó terciar en la interna del PJ. La recepción de Francos a Yoma podría interpretarse como un cambio de actitud. El tuit de Javier Milei, horas más tarde, parece ratificarlo.