Hezbolá tiene nuevo jefe. El movimiento chiita libanés anunció la designación de su nuevo secretario general, quien fuera el número dos de la agrupación, Naim Qassem, luego de que su antiguo líder, Hasán Nasralá, fuera abatido en un ataque israelí al sur de Beirut.
El nombramiento del segundo al mando viene después de que Hashem Safieddine, el líder del consejo ejecutivo, quien se perfilaba como el sucesor de Nasralá, muriera el 4 de octubre a raíz de otro bombardeo israelí al sur de la capital libanesa.
Miembro fundador
Qassem, de 71 años, forma parte del grupo de individuos que fundaron Hezbolá en 1982, y se desempeñó como secretario general adjunto de la formacion desde 1991, un año antes de que Nasralá asumiera el comando del movimiento islamista.
Nacido en el barrio de Basta Tahta de Beirut en 1953, el religioso inició su andadura en la militancia política chiita en Amal, otro movimiento de la misma rama del islam que abandonó en 1979 en medio de la Revolución Islámica de Irán. En ese contexto, pasó a formar parte de los comités encargados de fundar Hezbolá y perfilar las ideas del movimiento, dedicado a resistir la invasión israelí del Líbano en 1982.
Qassem ha ejercido como el principal representante político de Hezbolá y fue el encargado de coordinar las campañas electorales del grupo desde su fundación hasta que fue nombrado vicesecretario general en 1991 por el primer líder de la formación, Abás al Musawi, que también fue asesinado por Israel un año después en un ataque con helicóptero.
Sin embargo, Qassen no lo sucedió en el cargo, siendo elegido en su lugar Hasán Nasrala, quien lideró el partido hasta que un bombardeo de Israel acabó con su vida el pasado 27 de septiembre, en lo que se considera el mayor golpe que ha recibido el movimiento político armado en toda su historia.
En 2004, el nuevo líder escribió "Hezbolá: La historia desde dentro", un libro en el que recuenta la fundación, las ideas y la postura de un movimiento entonces en auge, así como su rol en la organización.
Más de cuatro décadas después de su fundación, y con la nueva ocupación de Israel en territorio libanés, Qassem se erige como abanderado del estandarte amarillo del partido.
Figura pública
El nuevo dirigente del grupo chiíta fue el representante con más cargo en continuar apareciendo en público, desde que Nasralá empezó a vivir la mayor parte de su tiempo a escondidas, tras la guerra de Hezbolá contra Israel en 2006.
Una de las últimas entrevistas que concedió fue a la cadena estadounidense NBC en abril de 2024, cuando defendió que el grupo estaba comprometido a no intensificar sus enfrentamientos fronterizos con Israel.
Desde la muerte de su predecesor, Qassem ha pronunciado tres discursos televisados, usando un árabe más formal que el libanés coloquial que acostumbraba usar el difunto líder.
Tres días después del asesinato de Nasralá, el propio Qassem fue quien dio la cara por el grupo, y aseguró en un discurso televisado que el nombramiento de un nuevo líder se anunciaría "lo antes posible", al tiempo que tranquilizó a sus seguidores con que "en caso de guerra siempre hay alternativas". "Cuando un comandante se va, otro aparece", afirmó el clérigo en el discurso.
Nuevo objetivo
Casi inmediatamente después de hacerse oficial el nombramiento de Qassem, el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, señaló al nuevo secretario general como el nuevo objetivo del Ejército israelí, mediante un breve mensaje en la red social X. "Nombramiento temporal. No por mucho tiempo", anticipó Gallant en el mensaje.
El portavoz internacional del Ejército israelí, Nadav Shoshani, también mandó un mensaje de "bienvenida" a Qassem, recordando la muerte esta mañana de un joven de 24 años en el norte de Israel tras el lanzamiento de una andanada de cohetes desde Líbano contra la región de Galilea.