![function body_3(chk,ctx){return chk.f(ctx.getPath(false, ["author","title"]),ctx,"h");}](https://images.pagina12.com.ar/styles/width470/public/2018-01/washington-uranga2.png?itok=qxgUEP1_)
En la jornada en que se conmemoró el “Día internacional de los cuidados”, la “Mesa Ecuménica por la Democracia, la Vida y el Bien Común” realizó por tercera semana consecutiva una celebración en la que se puso de relieve el trabajo de cuidado comunitario de las mujeres que en los barrios sostienen la vida en comedores, merenderos y dispositivos de contención de las niñeces y las personas adultas mayores. El encuentro se hizo nuevamente en la plazoleta contigua el ex Ministerio de Desarrollo Social, en Belgrano y Lima, en la Ciudad de Buenos Aires, con el lema “La peor violencia es el hambre”.
En la oportunidad, el pastor Leonardo Schindler, presidente de la FAIE (Federación Argentina de Iglesias Evangélicas) expresó que “las iglesias herederas de la Reforma protestante, conmemoramos un nuevo aniversario de la Reforma y nuestra herencia evangélica en la calle, junto a las personas más vulnerables, junto a las víctimas de las políticas de exclusión y hambre del gobierno nacional”.
En esta ocasión, la celebración fue dirigida por Gladys González, de la Pastoral Social Evangélica, y contó con la participación de Norma Morales, Secretaria Adjunta de la UTEP, Marina Joski, de la Escuela de Cuidados Comunitarios de Barrios de Pie – UTEP y de trabajadoras comunitarias con quienes se realizó para finalizar el encuentro la “Ronda de las Ollas Vacías”. Las manifestantes destacaron la tarea y acciones de cuidado que cotidianamente desarrollan desde sus ámbitos, labor “no retribuida económicamente pero esencial para sostener la vida en espacios donde el hambre pega fuerte”. “Trabajo sobra”, dijeron, “pero nos falta el pan”.
Las y los participantes pronunciaron conjuntamente y a viva voz el Padrenuestro, “oración cristiana en la que se recuerda que el pan no es un bien personal, sino un bien comunitario, ‘nuestro’ ”, señalaron los organizadores. Una vez terminado el rezo se repartió el pan entre las personas presentes, como se hace cada semana.
Para Margarita Zubizarreta, de la Red de Apoyo Escolar (RAE), las organizaciones religiosas “pueden aportar acciones de solidaridad, dar respuesta a necesidades urgentes como el hambre, pero también generar espacios de escucha por la angustia y la desesperanza, espacios de encuentro y recuperación progresiva de lazo social con niñeces, juventudes, familias, personas mayores”.
Según el sacerdote católico Rodolfo Viano, Cura en la Opción por las y los Pobres (COPP), “la unidad del campo popular la vamos construyendo también desde la Mesa Ecuménica que prioriza nuestra fe común en el Dios de Jesús, el Dios de las víctimas y de quienes se ponen de su lado, por encima de nuestras diferencias eclesiásticas, de nuestras pertenencias a distintas iglesias cristianas”. Porque –agregó- “la solidaridad se hace efectiva cuando intentamos ponernos en el lugar de quienes están sufriendo la falta de oportunidades que nosotros sí tuvimos y tenemos”.
El propio Viano invitó a las personas presentes a acompañar la iniciativa todos los martes a las 15:30 en el mismo lugar. Para las próximas semanas se prevé abordar la situación de las niñeces excluidas, “el hambre de la cultura, el hambre de trabajadores/as despedidos/as y todas las hambres que atentan contra la dignidad de las personas”.
El encuentro fue apoyado musicalmente por La Tranquera (Lili Isaguirre y Kochy Guchea), que cada semana invitan a cantar canciones que acompañan los reclamos populares.
El martes anterior, una delegación encabezada por el Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, presentó en la mesa de entradas del Ministerio de Capital Humano una solicitud de audiencia urgente con la ministra Sandra Pettovello que aún no ha recibido respuesta. El propósito de ese pedido tiene que ver con la necesidad de garantizar alimentos para los comedores populares.
La “Mesa ecuménica, por la democracia, la vida y el bien común” es un agrupamiento espontáneo integrado hasta el momento por la Federación Argentina de Iglesias Evangélicas (FAIE), Servicio de Paz y Justicia (SERPAJ), Comisión Argentina para Refugiados y Migrantes (CAREF), Pastoral Social Evangélica (PSE), Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos (MEDH), Curas en Opción por las y los Pobres (COPP) y la Fundación Hora de Obrar.
