“Una sesión histórica”, así calificaron las diputadas mujeres la sanción de la Ley de Paridad de Género que fue votada ayer en el Congreso por una amplia mayoría -165 votos a favor y 4 en contra de los legisladores de la izquierda-, tras ser impulsada sorpresivamente en medio de la sesión con apoyo de las mujeres de todos los bloques. Con la nueva ley, que ya contaba con media sanción del Senado, las listas de las próximas elecciones parlamentarias de 2019 deberán estar conformadas por un 50 por ciento de mujeres, intercaladas sucesivamente con los candidatos varones. Hasta ahora, la Ley de Cupo aseguraba la representación de las mujeres en un tercio de los escaños.
La sanción de la ley sorprendió incluso a los legisladores, ya que no formaba parte del plan de Labor Parlamentaria acordado para la sesión. El tratamiento fue propuesto durante en el recinto, con el apoyo de las mujeres de todos los bloques. La diputada Victoria Donda impulsó la incorporación del dictamen al temario y fue respaldada por su par del Frente Renovador Graciela Camaño. La radical Karina Banfi se quejó por la incorporación del tema sin previo acuerdo, aunque al final el oficialismo acompañó la iniciativa.
Camaño convocó a sus colegas mujeres a repetir la "hazaña" del 1991 cuando las mujeres trabaron la discusión del presupuesto y obligaron a votar la ley de cupo femenino y en ese sentido recordó cuando “14 mujeres especulamos con el quórum y los obligamos a sancionar esa ley que permitió que gran cantidad de mujeres estuviéramos acá”. “No estamos haciendo ninguna locura; estamos aprovechando este momento para sacar una ley histórica”, apuntó.
La propuesta fue sumando respaldo no sólo de las legisladoras mujeres opositoras sino de la propias diputadas ligadas al oficialismo, como Carla Carrizo y Brenda Austin, quienes pidieron votar a favor de la ley. “Apoyamos la paridad y esto era un acuerdo con los colegas varones porque la idea es que se implemente en las próximas elecciones”, sostuvo Carrizo.
Tras ser votada la incorporación en el temario como último punto, las mujeres solicitaron que se votara de forma inmediata, lo que fue aceptado por el presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó. Con 165 votos a favor y 4 en contra, de los diputados de izquierda, el proyecto finalmente se convirtió en ley y las diputadas que lo impulsaron festejaron el hecho como una “sesión histórica” por la paridad de género.
Con la nueva ley, las listas de las próximas elecciones legislativas deberán intercalar hombres y mujeres sucesivamente. “Tres momentos históricos de ampliación de #derechos para las mujeres argentinas. Hoy estamos contentas por esta victoria en el Congreso. Por delante tenemos las conquistas que faltan”, festejó en su cuenta de Twitter la diputada por el Frente para la Victoria Cristina Álvarez Rodríguez.
En cambio, el diputado de izquierda Juan Carlos Giordano se quejó porque el proyecto “no se haya podido debatir porque nosotros tenemos muchos argumentos para oponernos desde la izquierda” y dijo que en ese sector “las mujeres representan el 70 por ciento de las listas y ahora vamos a tener un tope”.
El proyecto, que había sido aprobado en octubre de 2016 por el Senado, introduce el artículo 60 bis en el Código Nacional Electoral y fija la obligatoriedad de intercalar candidatos de ambos sexos en las listas de legisladores nacionales. A su vez, el proyecto incorpora la igualdad de género a nivel partidario, aunque en este caso no será obligatorio intercalar postulantes, sino que las listas deberán completarse con un 50 por ciento de representantes de cada sexo.