Considerando la historia Argentina y los dictados de la realidad, se puede deducir la acelerada pérdida de credibilidad que sufre el gobierno de Javier Milei. En relación a lo histórico, evocar las tragedias vividas por la sociedad en cada uno de los gobiernos neoliberales, multiplicadas en el gobierno actual. El eje central del neoliberalismo pasa por la transferencia coercitiva de bienes y ahorros de la sociedad hacia el poder económico concentrado, cuyo núcleo central son las corporaciones oligopólicas “formadoras de precios”.

La transferencia de ingresos implica necesariamente incremento de pobreza, indigencia y muertes evitables. En términos matemáticos: el superávit fiscal como ingresos menos egresos pagados y dejados de pagar, supone el superávit del sector público que no puede derivar contablemente en otra cosa que el déficit del sector privado, que se traduce en infortunio social. El “innegociable superávit fiscal” no es más que un ardid para encubrir el saqueo a la sociedad y la entrega de nuestros recursos naturales.

Auto definirse anarcocapitalista permite - en simultáneo -, camuflar la política neoliberal y coincidir con la expresión del adalid del presidente, Murray Rothbard: “Cada ser humano se especializa en lo que es peor”. En este caso, gobernar. Mínimos ejemplos: según el Banco Central a partir de REM (Relevamiento Expectativas de Mercado), la inflación para el año 2024 rondará el 123 por ciento; la caída del PIB será 3,8 por ciento. 

Según CEPA la caída en el primer semestre llegó al 8,1 por ciento; según INDEC el índice de pobreza en primer semestre de gobierno 52,9 por ciento (un aumento de 11 puntos en un semestre); el de indigencia (hambre) 18,1 por ciento de personas. El coeficiente de Gina que mide la desigualdad social fue de 0,467 en el segundo trimestre. En igual período de 2023 fue de 0,446. Este indicador explica que cuanto mayor es la desigualdad, sus valores más se aceran a uno. La deuda pública en siete meses aumentó 81.000 millones de dólares, cuando las reservas del BCRA superan en negativo los 5000 millones de dólares sustraídos de cuentas bancarias, sumado a pagos de deuda para 2024 por 3000 millones y para 2025 17.500 millones.

Elementos de la historia neoliberal 

La mentira. Un elemento repetitivo en todos los gobiernos neoliberales es la mentira sistemática, como arma de imponer el poder, ante la desazón de la sociedad. Según Hannah Arendt “la mentira organizada siempre tiende a destruir lo que se haya decidido negar”. Destruir, incluidos, seres humanos. Es el caso del intento de genocidio que sufrió Cristina F. de Kirchner, un apellido repetido en diferentes gobiernos neoliberales, ligado a la depredación social a través del serial endeudamiento para financiar fuga de divisas. Contando, además, con la impunidad y connivencia del autocrático Poder Judicial. Igualmente, durante el gobierno neoliberal de F. De la Rúa fueron asesinados 39 manifestantes. A se vez, en el gobierno neoliberal de la Dictadura Militar fueron torturados asesinados -algunos arrojados al mar con vida-, 30.000 seres humanos argentinas/os.

ENDEUDAMIENTO EN DOLARES. El gobierno de la Dictadura Cívico Militar aumentó el endeudamiento en 40.000 millones de dólares. En el gobierno de Menem al terminar su mandato la deuda alcanzó la cifra de 146.000 millones de dólares. F. De la Rúa incrementaría la deuda a 180.000 millones de dólares. El gobierno de Macri se endeudó en 100.000 millones de dólares, de los cuales se fugaron 85.000 millones de dólares. El actual gobierno se endeudó en 81.000 millones de dólares en siete meses. 

ATRASO CAMBIARIO. Todos los gobiernos neoliberales atrasaron el tipo de cambio para generar recesiones bajo el discurso de bajar la inflación. Desde la “tablita” de Martínez de Hoz en la Dictadura Cívico-Militar, hasta el crawling-peg en el actual gobierno. La inflación se mantuvo y a la vez, las creadas recesiones generaron salarios y jubilaciones de hambre. Esta fechoría, fue festejada por J. Milei, funcionarios y socios políticos. (UCR-PRO).

DESTRUCCIÓN INDUSTRIAL. El neoliberalismo repite el objetivo de primarizar la economía. Para cumplirlo, requiere un proceso de exterminio de empresas PyMEs por ser el motor de la actividad industrial y, por ende, del crecimiento económico, la creación de empleo y salarios dignos. Por un lado, genera recesiones que liquidan el mercado interno; por otra parte, impone apertura de importaciones. 

FINAL. Lo que también se repite, es el fracaso. A veces con final cruento, y otras veces anticipado. El fracaso del gobierno de Javier Miles – que implica un catástrofe social -, resulta irreversible dado que el libreto neoliberal carece de recambio y, por ende, no logrará modificar sus nefastas acciones: solo repetirlas. En cambio, la característica del final, dependerá no solo de lo anterior, sino del accionar de las fuerzas políticas de la oposición principalmente del peronismo y la historia de quienes ejercerán la conducción del mismo. Es decir, contar con el “amor a la Patria y el coraje” que se tuvo a partir de 2003 hasta 2015, para revertir una calamidad similar a la actual, provocada por el neoliberalismo.

*Contador público-economista [email protected]