La muerte de Francesca Mazza, una niña de 12 años que falleció durante un viaje de egresados en Córdoba, conmocionó a la comunidad educativa y a su familia en Mendoza. Ahora se conoció el resultado de la autopsia, que aclaró algunas de las dudas en torno a este trágico suceso. El informe preliminar indicó que la menor sufrió un infarto masivo, lo que descarta la hipótesis del ahogamiento, ya que no se encontraron signos de agua en sus pulmones ni golpes en su cuerpo.
Francesca perdió la vida el pasado martes en el parque acuático Mundo Cocoguana, donde su grupo de compañeros disfrutaba de una jornada recreativa. Según fuentes oficiales, la ambulancia que llegó al lugar encontró a la niña sin vida, a pesar de que los paramédicos realizaron maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP).
Si bien la causa está bajo secreto de sumario, se conoció que, tras tener el resultado de la autopsia, los investigadores aún consideran necesario realizar estudios complementarios para entender las circunstancias que llevaron a este fatal desenlace.
Leandro Gianeta, encargado del parque acuático, aseguró que los empleados actuaron rápidamente para rescatar a la niña en los momentos previos a la llegada del personal de salud. Sin embargo, las circunstancias exactas que rodean la tragedia continúan siendo objeto de investigación.
El segundo caso en un mes
La muerte de Francesca fue la segunda en octubre, en el marco de un viaje de estudio a la provincia de Córdoba.
El caso anterior fue el de Juanita Milagros Sirimarco Díaz, de 13 años, que murió el 11 de octubre en Posadas, donde vivía, luego de volver del viaje de egresados que había realizado junto a sus compañeros del Instituto Cristiano República Argentina, en Villa Carlos Paz. Volvió descompuesta y por ello la internaron.
Allí detectaron que en su estadía en Córdoba contrajo el virus Influenza B positivo. A pesar de estar atendida y controlada en el hospital, la infección avanzó de manera drástica y murió a causa de un shock séptico.
En octubre también hubo otro caso de muerte de una joven en el marco de un viaje de egresados, aunque fue en Bariloche, provincia de Río Negro. Selene Peretti tenía 17 años y cursaba el último año de la secundaria en una escuela de Verónica, Punta Indio, una localidad ubicada a 140 kilómetros de Capital Federal.
Su promoción llegó a la ciudad rionegrina el 6 de octubre. El día anterior había sufrido un episodio de cuadro febril y fue atendida por médicos, pero finalmente la autorizaron a emprender la aventura rumbo al destino turístico de la Patagonia.
Un día después de llegar a Bariloche, volvió a presentar fiebre y la misma sintomatología que había tenido en su casa. Ante este panorama, fue trasladada al Sanatorio San Carlos, donde le practicaron una serie de estudios que revelaron que cursaba mononucleosis.
Su condición comenzó a deteriorarse y el viernes 11 de este mes su cuadro de salud se agravó. Allí sufrió un paro cardíaco del que pudo recuperarse, pero luego habría sufrido una infección generalizada que afectó el funcionamiento de todo su organismo.
