Barracas Central llegó al Gigante con una estadística muy adversa: perdió diez partidos, más de la mitad de los que jugó, y solo tenía dos triunfos. Anoche, en Arroyito, el último equipo de la tabla dio cuenta de lo mal que está Central y lo venció por la mínima diferencia. Fue por un golazo de Facundo Bruera. Pero en verdad la victoria de Barracas se concretó por la desorientación que hay en los canayas para jugar el fútbol, síntomas que se vieron a lo largo de todo el año. A la dirigencia le urge buscar técnico para el año que viene.
El problema grave de Central es que juega al fútbol sin resolver ninguno de las flaquezas que carga desde que se inició el año. Jugadores en bajo nivel, sin argumentos colectivos, la suerte en cada partido tiene mucha dependencia. Y cuando se depende del azar, se sabe, no se llega a ningún lugar deseado. El equipo de Matías Lequi no se diferenciá en nada al equipo de Miguel Russo. Anoche, por caso, esas dificultades estuvieron más visibles porque fue superado por el último de la tabla, un rival que se llegó al Gigante con solo dos victorias en el campeonato.
En el primer tiempo Central tuvo intenciones. Pero sin ideas sus aspiraciones naufragaban rápido ante cada intento. Malcorra hace tiempo que no lidera al equipo, Gómez nunca marca diferencias y el despliegue de Copetti y Ruben es insuficiente si el equipo no lo acompaña con la pelota. Es por es que Barracas Central no tuvo ningún complejo para jugar en campo rival cuando se hacía de la pelota. Central fue impotencia y Barracas esperaba por su oportunidad, motivado por un canaya que no le hacía daño.
La ocasión para la visita se abrió con el inicio del segundo tiempo. Es verdad que Bruera hizo un golazo. Pero acto seguido Ibarra deja al equipo por doble amonestación, aunque era cuestionable la decisión. El delantero de Barracas sorprendió a Broun con una espectacular mediavuelta fuera del área. Definió de zurda al ángulo derecho del arquero. Y Central, en desventaja, perdió el control emocional del encuentro.
Los nervios sacaron al canaya de su tarea. Gómez y Coronel vieron la amarilla y Lequi los reemplazó. Ruben no paró de correr, desesperado por encontrar contacto con la pelota. Pero nada en el juego de Central conectaba a volantes con delanteros. Y la derrota decantó irreversible. Una derrota que deja a Lequi sin futuro en el club.
0 Central: Broun; Coronel, Mauricio Martínez, Giménez, Sández; Duarte, Gómez, Ibarra, Malcorra; Copetti, Ruben. DT: Matías Lequi.
1 Barracas Central: Ferrario; Capraro, Sánchez, Demartini, Brochero; Tapia, Miloc, Insua; Puig, Bruera, Rosane. DT: Rubén Darío Insua.
Gol: ST: 1m Bruera (B)
Cambios: ST: 26m Ocampo y Lovera por Coronel y Malcorra (C), 31m Ruiz y Herrera por Tapia y Miloc (B), 38m Segovia por Gómez (C), 45m Martínez Dupuy y Giaccone por Duarte y Copetti (C).
Arbitro: Nicolás Lamolina
Cancha: Central
Expulsado: ST: 2m Ibarra (C).