La zona norte de Rosario, entre los barrios Alberdi y La Florida, fue el marco geográfico donde Santiago Dalleva (guitarras), Renzo Orlandini (guitarras), Facundo Tarrés (teclados) y Jorge Martínez (violín) empezaron a intercambiar ideas musicales, que se plasmaron en diversos proyectos hasta encontrar un cauce definitivo en Bajomundo, grupo instrumental que se completaría con la bandoneonista Agustina Taborda. Con esa formación registraron su primer disco homónimo, con el que cierran una primer etapa en la que asentaron un sonido vinculado a la combinación de diversas corrientes de la música popular. Sumando ahora a Lucas Maxit en contrabajo y a Lucía Coggiola en bandoneón (que reemplazó a Taborda, actualmente radicada en Europa), Bajomundo presentará formalmente su debut esta noche, a las 22, en el Complejo Cultural Atlas de Mitre 645, donde hasta las 19 podrán adquirirse anticipadas a 100 pesos (sobre el horario del concierto, el precio será de 150 pesos).
Formado en 2014, Bajomundo tuvo una rápida inserción en la escena musical. En octubre de 2015 actuaron en el Centro Cultural Kirchner, luego de ser seleccionados en el programa federal Más cerca del Arte que impulsaban los ministerios de Cultura y Planificación de la Nación. Y fueron dos los conciertos brindados por el grupo en el CCK (en la Cúpula y en la Ballena Azul), sucesos que terminaron por convencerlos de avanzar en el registro de su primer disco, que concretaron a fines de 2016.
Con una formación que podría asociarlo rápidamente al tango, el sexteto tiene al género ciudadano como uno de los tantos que confluyen en un repertorio de obras propias. "Hay mucho de blues y mucho de tango, pero en el medio también podés encontrar jazz gitano, swing, valsecitos. Todo con un criterio compositivo de lo que es la música para imágenes, la música para películas. No es que lo arrancamos pensando así, pero a todos nos gusta el cine, el teatro, y nos sale así naturalmente", explica Facundo Tarrés, tecladista del proyecto.
Esa coexistencia con las artes visuales se traslada también a las presentaciones en vivo. El lanzamiento oficial del disco no será la excepción: "Tratamos de montar los recitales para que no sólo sea un show musical, sino que conviva con distintos lenguajes. En el Atlas va a haber una pantalla con imágenes y van a participar dos actores representando a los personajes de los bajosmundos. Porque si bien hacemos música instrumental, nosotros damos un mensaje, hay un compromiso social, una identidad marcada que tratamos de reflejar tanto desde las imágenes como desde la actuación".
La función, además, significará el cierre de un proceso de trabajo, según adelanta el tecladista: "El disco es el fin de una etapa. De hecho ya empezamos a tocar temas nuevos, que no hemos presentado en vivo, porque queríamos consolidar esta primera etapa. Tenemos ideas nuevas, y la idea es enfocarnos en armar el nuevo disco a partir del año que viene".