La Justicia chilena ratificó la condena en contra de 31 exagentes de la dictadura civil militar de Augusto Pinochet como autores, coautores y cómplices del secuestro de la dirigente comunista Reinalda Pereira en 1976, embarazada de cinco meses al momento de su detención y quien a la fecha se encuentra en calidad de detenida desaparecida.
Según estableció la Corte Suprema, máximo tribunal del país, Pereira, tecnóloga médica de profesión, trabajaba asilando personas buscadas por los organismos de seguridad y se desempeñaba como enlace al interior de la estructura clandestina del Partido Comunista chileno, sometido a una política de exterminio durante el régimen dictatorial.
El fallo de la corte determinó que, a sus 29 años de edad, Pereira fue detenida por agentes de la Dirección Nacional de Inteligencia (DINA) -la policía política del régimen- cerca de las 20:30 horas del 15 de diciembre de 1976 mientras esperaba locomoción colectiva en una esquina de la actual comuna de Macul, en la Región Metropolitana.
Tras ser aprehendida violentamente en la vía pública, "la víctima fue trasladada al cuartel secreto de reclusión Simón Bolívar, donde fue vista junto a otros privados de la libertad que, a su vez, habían sido detenidos por las mismas brigadas bajo la política operativa entre el 13 y 15 de diciembre de 1976", detalla la sentencia.
En el lugar de reclusión, señala la investigación judicial, Reinalda Pereira "fue duramente golpeada, torturada, apremiada ilegítimamente y luego hecha desaparecer, sin que hasta la fecha se tengan noticias de su paradero".
"Un fallo de enorme importancia"
“Se trata de una sentencia moderna basada en el derecho internacional que rechaza amnistía, prescripción y media prescripción. Se trata de un fallo de enorme importancia por la cantidad de condenados a penas de presidio efectivo, en un proceso exitoso gracias al enorme trabajo del ministro Miguel Vásquez Plaza”, señaló el abogado querellante Nelson Caucoto respecto a las condenas de 10, 7 y 4 años de cárcel según el grado de participación de los criminales sentenciados.
"Fue realmente impactante lo que hicieron los agentes del Estado cuando Reinalda estaba detenida: fue objeto de golpiza física a pesar de su notorio estado de gravidez, fue torturada también con corriente eléctrica, para finalmente ya desfallecida se le aplica una dosis de pentotal. Posteriormente con un soplete le queman el rostro y las huellas dactilares, la empaquetan y su cadáver se hace desaparecer en la Cuesta Barriga”, sostuvo el abogado.
La búsqueda de los desaparecidos en Chile
La dictadura de Pinochet dejó al menos 3.200 opositores asesinados, de los que 1.469 fueron víctimas de desaparición forzada. Tras décadas de búsqueda se encontraron e identificaron los restos de 307 y aún falta encontrar a otros 1.162, según las últimas cifras oficiales.Es la primera vez desde el retorno a la democracia que el Estado chileno asume la búsqueda de los desaparecidos, pues hasta ahora la tarea había estado a cargo de grupos de familiares, agrupaciones de víctimas de la dictadura y organizaciones de derechos humanos.