Puppy Love
Mary Oliver escribió muchísimos poemas sobre perros. En uno de ellos, está mirando la luna junto a él: “Percy se reclina /sobre mí y gira su cabeza para mirarme, /como imaginando que sólo yo/ puedo ser tan maravillosa como la luna”. Desde 2021, hay un concurso fotográfico que propone volver a mirar a los perros para devolverles un poco de la amabilidad que tienen con nosotros: The Dog Photography Awards. Se acaban de conocer los ganadores de la nueva edición de este que, según explican los organizadores, buscan “descubrir talentos y mostrar la extraordinaria diversidad y encanto de los perro”. La argentina Valeria Cassina ganó en la categoría Foto de Estudio con una imagen llamada “Metamorfosis canina”. Se trata de dos perros parados a cada lado de un espejo que refleja la espalda de una mujer. Así se crea una ilusión visual que alarga los cuerpos de los perros pero que además “invita a los espectadores a explorar temas de identidad, conexión y la naturaleza transformadora de las relaciones que compartimos con nuestras mascotas”, según el dictamen del jurado. Otras categorías son Retratos, Perros en Acción, Perros y Personas, y Foto Documental. Así es posible ver una foto de un caniche enano junto a su pequeña dueña en rehabilitación oncológica, que recrea el cuento clásico de la princesa sentada sobre muchísimos colchones que aún así percibe el guisante que hay debajo. A esta se suman otras imágenes con perros de razas nobiliarias o no en las nieves de Groenlandia, en la estepa rusa o en un hogar para bichos rescatados en España. No se trata de trabajos azarosos. En general, son parte de ensayos fotográficos que exploran la singular conexión de los perros con su hábitat. También, con el modo en que vienen transformando nuestra vida y la de ellos desde el fondo de los tiempos, señalando que la animalidad es una gramática de la que aún tenemos mucho por aprender.
Cenizas y diamantes
Aún entre las ruinas, el deseo se abre paso. Al menos eso es lo que nos vienen a enseñar los frescos eróticos que constituyen el último descubrimiento en las ruinas de la antigua ciudad romana de Pompeya. En la llamada Casa de Fedra, en honor a la reina mitológica de Atenas, los expertos encontraron pinturas murales de colores vivos incluyen n encuentro sexual entre un sátiro y una ninfa en una cama, y otra de Fedra y su hijastro Hipólito (según la leyenda griega, ella lo acusó de violación después de que él rechazara sus insinuaciones). Otro fresco presenta dioses que, se presume, son Venus y Adonis. A pesar de su pequeño tamaño, la vivienda “nos sorprende por el alto nivel de la decoración de sus paredes”, dijo en un comunicado el parque arqueológico de Pompeya, añadiendo que los frescos eran comparables a los encontrados en casas más opulentas. Este nuevo hallazgo arroja luz sobre los estilos arquitectónicos cambiantes en el siglo I d.C., pero también es una prueba más de que los residentes de Pompeya tenían apetito por el arte sensual. Desde el siglo XIX, Pompeya sigue desnudando su exuberancia. En esa época, en la Casa de los Vettii, que era propiedad de dos hombres liberados de la esclavitud, se encontró un fresco similar a los hallados ahora, que muestra a Príapo, el dios de la fertilidad con un gran pene oscilando sobre una balanza, junto a una bolsa llena de dinero. Ciertas imágenes actuales muestran más o menos la misma escena, en verdad. Pero con mucha menos onda.
Iglesia pop
“Queremos conectar con la cultura pop, tan querida por nuestros jóvenes”. Estas palabras no fueron dichas por cualquier señor provecto sino por el mismísimo arzobispo del Vaticano, Rino Fisichella, organizador del Jubileo 2025. En ese marco, el Fischella presentó en sociedad a Luce, la primera mascota con estilo de animé de la historia cristiana, que será el rostro del próximo Año Santo de la Iglesia Católica. Ningún detalle de Luce (que significa “luz”) quedó librado al azar. Ella tiene un impermeable “que hace referencia a la bandera vaticana y a las tormentas de la vida”, botas embarradas que representan el largo y difícil camino del peregrino y un bastón que simboliza la peregrinación hacia la eternidad. Simone Legno, cofundador de la marca de cultura pop Tokidoki, diseñó a Luce. Y también, a sus “amigos peregrinos”: Fe, Xin y Sky. Todos ellos serán presentados nuevamente este fin de semana en el Lucca Comics, en la región toscana. Se trata de un mega festival de cómic de Europa, que atrae a la comunidad geek de todo el mundo. Además de su papel en el Jubileo, Luce será la imagen del pabellón de la Santa Sede en la Expo 2025 de Osaka, en Japón. Esta movida no solo busca atraer a la juventud a las aguas cristianas sino que además es un modo en que la Iglesia sigue siendo, a su modo, un actriz política de peso. De hecho, el Papa iniciará el jubileo en San Pedro primero y en la cárcel romana de Rebibbia después, pidiendo amnistías para las personas presas, en otro gesto inédito.
Huesos desnudos
En lo más profundo de las calles de París, los muertos siguen hablando. Cuentan qué los mató, quiénes eran, qué enfermedades tenían. Así que es la muerte, de manera paradójica, quien tiene la última palabra en relación a cómo era la vida unos mil años atrás. Esto es lo que aborda el primer estudio científico que se realiza en Las Catacumbas de País. Un equipo de arqueólogos, antropólogos, biólogos y médicos está examinando algunos de los esqueletos de cinco a seis millones de personas cuyos huesos fueron arrojados a pozos de cantera a finales del siglo XVIII y principios del XIX. “Por sorprendente que parezca, nunca se ha realizado ningún estudio científico serio sobre las catacumbas”, afirmó Philippe Charlier, que dirige el proyecto. “Nuestra investigación analiza mil años de historia de la salud pública en París y alrededores, de la medicina y la cirugía a las que se sometió a las personas y las enfermedades que sufrieron. Hay otros osarios en el mundo, pero este es probablemente el más grande, por lo que es único”, agregó. Es que se trata de una red de 300 kilómetros de túneles a 20 metros bajo tierra que, según The Guardian, despiertan el interés de 550 mil visitantes por año. En la crónica que escribió sobre ese sitio como parte del libro Alguien camina sobre tu tumba, Mariana Enriquez cuenta: “Hace frío aquí abajo. La temperatura se mantiene en catorce grados, aseguran, pero parece mucho menor. Blanco y marrón, gris de polvo, un olor extrañamente seco: el osario es uniforme, abrumador y prolijo”. Y amplía: “Aquí no hay momias, no hay gestos de agonía, hay paredes de huesos acomodados con cierta gracia”. Esas paredes son las que el equipo de la Universidad de Versalles y Saint-Quentin-en-Yvelines viene estudiando. Además de analizar las amputaciones, trepanaciones y autopsias, el estudio busca determinar qué enfermedades padecían estas personas, así como intoxicaciones por metales pesados, como plomo, mercurio o arsénico. “También podemos ver, por ejemplo, si la sífilis que mató a alguien en el siglo XVI es la misma que la actual o si el agente infeccioso ha microevolucionado”, añadió Charlier. El equipo producirá los primeros hallazgos antes de fin de año. Sin embargo, el experto predijo que el trabajo sobrevivirá a su carrera porque no tiene fin: “Creo que los hijos de mis alumnos continuarán con esto y eso es bueno”, dijo. Porque lo mejor que podemos hacer por la muerte, es prestarle atención. Por algo es la única certeza que tenemos sobre nuestro destino.